(Publicado en la Revista Sardanyola a
partir de junio de 1965)
La calle más antigua de Sardanyola: la de San
Ramón.
Año 1913.
LA FIESTA DE SAN ANTÓN
Con gran alegría celebraron los cocheros de los carruajes de alquiler de esta villa la festividad de San Antón. Al serles
permitido por la alcaldía, este día holgaron pudiendo así celebrar con más dedicación la fiesta de su patrón.
EN CARNAVAL
Diversas «collas", de Ripollet, de Montmeló y Just acudieron a Mollet para bailar allí los populares bailes de gitanas.
Bajo la atenta mirada de la gran concurrencia que allí se congregó las collas de Ripollet obtuvieron un laudable éxito.
PIROPOS CON CASTIGO
Los primeros días de febrero fueron portadores de una disposición muy ejemplar y que a la vez aumentó el
stock de las buenas leyes que casi siempre pasan con pasmosa regularidad a la categoría de letra muerta porque nadie
cuida de hacerlas observar.
Tal disposición castigaba los piropos de mal gusto o subidos de color, con el solo hecho de que la señora piropeada
groseramente lo pusiera en conocimiento de la autoridad.
RUIDOS QUE APARECEN
Muchos aficionados al séptimo arte acogen con cierto interés las noticias que hasta aquí llegan acerca de un invento
llegado de muy lejos.
El famoso Edisson había inventado una modificación en el cinematógrafo consistente en producir las ruidos que haga
todo cuanto sea proyectado en las pantallas.
¡ESOS FUMADORES!
A pesar de que tan sólo se fumaba tabaco negro parece ser que eran tanto o más fumadores que ahora. En el mes de
abril no quedando mas remedio, se prohibió terminantemente que nadie fumase ya en el interior de los cines, teatros y más
salas que pudieran haber de espectáculos.
NUEVA TARIFA
Un ligero aumento afectaron los portes de correos, quedando la tarifa establecida de la siguiente manera: cartas para
el interior, 5 céntimos cada 20 gramos; tarjetas postales, 5 céntimos las sencillas y 10 las dobles; impresos, 1 céntimo cada
100 gramos; valores en metálico, 35 céntimos por derecho de certificado y franqueo como
único precio, no pudiéndose
incluir en ellos mas de 50 pesetas.
Ahora sin las calderillas... ¡vaya problemazo!.
¡CHINITOS SIN POLAROID!
La autoridad local tuvo en el mes de abril una empresa harto curiosa. Expulsar a una familia de chinos que se dedicaba
a vender objetos, y las mujeres a hacer curas más o menos... milagrosas.
¡VAYA PROGRAMA!
Numerosos sardanyolenses se trasladaron a Sabadell para juzgar por ellos mismos las cualidades de una película
catalogada como de monstruo.
En el cine Recreo de la vecina ciudad a la que pertenece Sardanyola, se proyectó la
película titulada ¿Quo Vadis? con
una duración de 3 horas y en la que intervinieron en ella 3.000 personas durante 3 años que costó su filmación, costando ya
por aquel entonces la suma de 800.000 pesetas.
UNA DE FRESCOS
Como que aun no se había inventado la «Investigación en Marcha" el Delegado de Hacienda de Barcelona tuvo que
hacer uso de las circulares para comunicar al alcalde de la villa, su atención hacia unos sujetos que se habían autotitulado
Inspectores de Hacienda, recorriendo así de esta manera los pueblos sin derecho alguno. Así, pues los alcaldes respectivos
quedaron autorizados a detener a dichos sujetos donde quiera que se presentasen
haciéndose pasar por dichos inspectores.