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Muertes por asbesto (o amianto) y
COVID-19
El sábado 6 de octubre del año 1973 era
el día más santo de los judíos, un día que es cuarentena absoluta y
donde ni siquiera hay radio y televisión, e incluso los servicios de
emergencia trabajan con menos personal y, sin duda alguna, el
Ejército mantiene la mínima cantidad de fuerzas en actividad de
vigilancia y control. Ese día los Ejércitos de Egipto y Siria, con
el apoyo de otros países, atacaron a Israel en una cruenta guerra.
Menciono esa guerra porque estuve allí, sin ser soldado, y estimo
que en muchos aspectos ha formado parte de las decisiones que tomé
en mi vida futura. Tenía entonces 24 años y así estimo que esta
guerra influirá en mis nietos. Los más grandes entre ellos, ya no sé
si en mis propios hijos. Yo sólo intento sobrevivir.
Así son
las guerras. La sorpresa es uno de los factores más importantes para
intentar derrotar al enemigo. Así nos pasó ahora, el COVID-19 nos
atacó sin previo aviso, por lo menos al público en general. No es
siquiera importante ahora –tal como señalé en otras notas– si se
escapó o le abrieron la puerta en el laboratorio, o hasta si es una
mutación natural, mutaciones que suelen ocurrir debido, en gran
medida, al comportamiento humano. Fue una sorpresa. Por lo menos
Bill Gates mencionó en el año 2015 que “el peligro del mundo es
biológico y no una guerra convencional”.
Las reacciones
fueron distintas en los diversos países. En primer lugar, podemos
ver que hay países como Japón, Corea del Sur y Alemania que no
declararon cuarentena general, pero sin dejar de tomar importantes
medidas para limitar la propagación de la enfermedad. Corea del Sur
que fue en su momento después de China el país con mayor cantidad de
enfermos, ha logrado controlar la enfermedad. En Europa, Italia y
España son los países más castigados y se suele acusar a la desidia,
falta de atención o falta de disciplina “latina”. Realmente todo es
posible y seguramente eso empujo a muchos países latinoamericanos a
decretar cuarentena, aislamiento absoluto y eso para evitar que la
gente –por no tomar las medidas de prevención necesarias– pueda
estar en los focos contagiosos. También creo que es una forma de
evitar manifestaciones populares de protesta.
En mi primera nota manifiesto todo tipo de especulaciones sobre
la conspiración que pueden ser parte del escenario general, entre
otras cosas señalo: Como todas las guerras, estamos en una que es
económica y desde hace tiempo se menciona la guerra comercial que,
sin duda, es parte de ella el coronavirus COVID-19. La suspensión de
la actividad económica causará muchos más muertos que el COVID-19 y
realmente afectará al mundo entero. ¿Habrá un nuevo orden mundial?
Reducción del consumo, menos turismo, desarrollo de industrias
locales. No lo sé, tampoco sabemos quién ganará esta guerra. Por lo
pronto, los precios de las acciones han bajado mucho y es posible
que bajen más, y el que tiene dinero puede comprar empresas con
“poca plata”.
Es de aceptación general que el COVID-19 no es
tan mortal, que las probabilidades de sobrevivirlo son
aproximadamente un 97%, y entonces me pregunto, ¿por qué se presta
tanta atención a este virus? Yo creo que se utiliza para tapar otros
problemas porque obviamente no se habla de ningún otro conflicto, y
se está buscando imponer la idea del empobrecimiento general que
provoca esta guerra. Cuando escribí esa nota a la que me refiero, un
amigo de la secundaria me pregunta en privado si yo creo que el
derrumbe de las Torres Gemelas en Nueva York, septiembre 2001,
también fue un acto de conspiración y copio aquí mi respuesta:
Sí señor. Allí se dan tres elementos que para mí ratifican la
posibilidad que fue planificado y obviamente manipularon y
permitieron que lo hiciera Al Qaeda. Bush necesitaba algo así para
la guerra en Irak. Los edificios tenían mucho amianto –también
llamado así al asbesto– y debían haber corregido eso ante la nueva
regulación de salud por el cáncer; era más barato tirarlos abajo y
ese camino era el más rentable. Uno de los que trabajaban ahí había
dicho o declarado que escuchó “bum-bum”, abajo en el sótano, al pie
de las columnas. Seguramente como ingeniero tendrás mejores
explicaciones que yo. Yo sólo lo manifiesto emergente de no creer en
nada ni en nadie.
Y el asbesto que estaba en las Torres
Gemelas es el mismo asbesto que afecta a millones de personas porque
es un producto cancerígeno que ya se ha prohibido en decenas de
países. El asbesto afecta los pulmones, así que es muy fácil
comprender o suponer que una población, generalmente mayor,
que sufre de asbestosis y es atacada por el COVID- 19, el cual
también afecta los pulmones, está destinada a morir. No es una gripe
sencilla, es algo más complicado. Ciertamente, si por neumonía todos
los años mueren muchas personas, estimo que muchos de los muertos
actuales murieron por ese mal y no precisamente por COVID-19 como se
dice, puesto que también se afirma que no todos pueden hacer los
análisis o no hay suficientes medios.
El asbesto, entonces,
puede ser, junto con el COVID-19, mortal para la población, y eso
explica en parte la gran cantidad de enfermos en el norte de Italia,
el área de producción en el pasado del asbesto.
Hace unos
días nos llegó el video sobre el hospital de Bérgamo con la cantidad
de personas internadas. ¿Alguno recuerda el caso de Eternit y los
juicios? Quizás no y no he visto notas al respecto, pero es probable
que las haya porque encontramos en la web millones de notas sobre el
COVID-19 y también ésta lo es. Pues bien, respecto a ese caso, todos
escucharon, como yo, la cantidad de enfermos en Lombardía. Pueden
visitar la empresa
Eternit en Bérgamo, fundada en 2012, dedicada a la fabricación
de tuberías, tejas y cubiertas, aunque en el 2019 sacaron un
comunicado asegurando que “dejarían de utilizar el asbesto (o
amianto) como materia prima para sus productos”. Seguramente tomaron
esa decisión a raíz del juicio que tuvieron respecto a la toxicidad
de ese mineral.
En España también encontramos que
aún hay mucho asbesto, como dice la nota: El amianto, también
conocido como asbesto o fibrocemento, está por todas partes.
En otro medio leí que el asbesto seguirá matando hasta el 2040 por
lo menos, y ahí figura lo siguiente, que tiene menos eco que el
actual COVID-19: Datos recientes, publicados por CCOO establecen que
sólo
en Madrid entre 4.000 y 5.000 personas podrían morir por
la exposición al amianto que sufrieron entre 12.000 y 15.000
personas de los 70 a los 2000 (6).
Es interesante seguir los
pasos al asbesto. En Argentina, por ejemplo, ya se prohibió su uso
en el año 2000, aunque por supuesto no se derribó ninguna
construcción que contiene asbesto. El comercio es comercio y a pesar
de que también está prohibido en España: entre septiembre de 2011 y
noviembre de 2012, el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires le
compró a España 36 vagones CAF 5000 para la red de subtes –red de
subterráneos de transporte– porteños, por 5 millones de euros.
Estas unidades tenían asbesto.
Obviaré la posición de
Estados Unidos que, como muchas otras cosas, dice y hace lo que le
conviene. En Colombia, sin embargo, en donde el panorama es
semejante a lo anteriormente expuesto, encuentro una nota que
coincide con lo que escribí sobre las investigaciones que se han
publicado, y es que después de muchos intentos de legislar la
prohibición del uso del asbesto en 2019, se aprobó una ley que
entrará en vigencia el 1º de enero del 2021.
Para finalizar,
en un medio español se incluye el siguiente dato: Todos estamos
expuestos de alguna forma, explica Gómez, y recuerda que al menos
100,000 muertes al año se registran en el mundo por culpa de esta
fibra. El enlace incluye dos elementos que deseo copiar:
a)
Las muertes por enfermedades relacionadas con el asbesto están
aumentando y, todavía, se desconoce su impacto real debido a la
ocultación de los datos. b) Se examinaron los números estimados
globales de incidencia y mortalidad de las enfermedades relacionadas
con el amianto. El asbesto (amianto) causa 255,000 muertes de media
–entre 243,223 y 260,000– anualmente.
Al momento del 1º de
abril del 2020, siendo las 11:04 horas, hora local de Colombia, hay
874,081 enfermos en el mundo, 43,291 han muerto y 185,194 se han
recuperado. De la asbestosis no se cura nadie, pero no se habla.
El último enlace que deseo compartirles, su título habla por sí
solo: El amianto… asesina y mata, y no es una frase hecha.
(https://elsemanario.com/opinion/muertes-por-asbesto-o-amianto-y-covid-19-julio-ioseph-may/)
2020-04-06
Indemnizan en 222.765 € al médico
de Uralita fallecido de asbestosis
•
El TSJA rechaza que, por ser
médico, hubiese debido adoptar más medidas de protección •
Es “evidente” la responsabilidad de la empresa por las “insalubres
condiciones de trabajo”.
El Tribunal Superior de Justicia de
Andalucía (TSJA) ha ordenado indemnizar en 222.765 euros al médico
de empresa de la fábrica de Uralita de Sevilla durante 24 años, que
falleció de un cáncer de pulmón como consecuencia de la exposición
continuada al asbestos en su lugar de trabajo. La sentencia rechaza
el argumento de la empresa de que, por su profesión, debería haberse
protegido al conocer la “nocividad de los elementos” con los que
trabajaba la industria.
La Sala de lo Social del TSJA, en una
sentencia a la que tuvo acceso este periódico, recuerda que el
demandante fue médico de empresa entre 1971 y 1995. Estando ya
jubilado se le reconoció como enfermedad laboral el mesotelioma
pleural que desarrolló “como consecuencia de la exposición
continuada al asbestos en el lugar de trabajo”. El médico falleció
durante la tramitación del procedimiento y la indemnización es
concedida ahora a su esposa e hijas.
La demanda solicitó
inicialmente 302.765 euros, que el juzgado de lo Social situó en
222.765 euros, ahora confirmados por el TSJA.
La diferencia
de 80.000 euros obedece a que los daños morales quedan cifrados en
100.000 euros en lugar de los 180.000 demandados debido al escaso
tiempo transcurrido entre la declaración de la incapacidad y el
fallecimiento del demandante, que tuvo lugar dos años después. “La
edad del trabajador en el momento del reconocimiento de la situación
de incapacidad permanente, estando ya jubilado, es un elemento
importante a tener en cuenta”, afirma la Sala de lo Social.
Uralita recurrió para reducir la cuantía porque el médico fue
declarado en situación de incapacidad varios años después de
jubilado y 19 años después de que dejara de trabajar para Uralita.
Además, su categoría de médico “lo hacía conocedor directo de la
nocividad de los elementos con los que se trabajaba, pudiendo haber
adoptado las correspondientes medidas de protección“.
Los
magistrados dicen que este argumento es “del todo insostenible” y
responden sarcásticamente: “desconocemos si la demandada pretende
hacer llegar a la Sala a la idea de que el trabajador, por su
condición de médico, debió de haber puesto en marcha las
correspondientes medidas de seguridad en la empresa, tales como
aspiradores, limpieza del centro de trabajo, mediciones de fibras de
asbesto o deshumectación”.
Por el contrario, afirman que la
responsabilidad de la empresa que “mantuvo las insalubres
condiciones de trabajo se hace evidente“.
Recoge el tribunal
que visitas efectuadas por la Inspección de Trabajo en los años
1989, 1990 y 1991 “evidenciaron la existencia de abundante polvo de
amianto en el centro de trabajo, zonas sin limpiar con fibrocemento
acumulado sobre tuberías, suelo, molinos y en la práctica totalidad
de la planta“ por lo que se impuso sanciones a Uralita.
Y
resume: “teniendo en cuenta que el trabajador fallecido estuvo
expuesto al amianto durante un muy extenso periodo de tiempo, es
indudable que la empleadora debe responder de los daños y
perjuicios”. Indemnizan en 222.765 € al médico de Uralita fallecido
de asbestosis El TSJA rechaza que, por ser médico, hubiese debido
adoptar más medidas de protección
Es “evidente” la
responsabilidad de la empresa por las “insalubres condiciones de
trabajo”. AMANDA GLEZ. DE ALEDO
(https://www.diariodesevilla.es/juzgado_de_guardia/sentencias/Uralita-indemnizacion-medico-asbestosis_0_1452754944.html)
6 abril 2020
Los accidentes laborales se cobran la
vida de 578 personas
La Secretaria de
Salud Laboral y Medio Ambiente de UGT considera que el auge del
servicio a domicilio, mensajería y la precariedad laboral, repercute
directamente en la seguridad y salud de los trabajadores.
Hasta el mes de
octubre de 2019 se han producido un total de 1.145.966 accidentes
laborales y se han registrado 578 trabajadores fallecidos en
accidente de trabajo, 6 más que los registrados hasta octubre de
2018. De los fallecidos, 516 eran trabajadores asalariados (las
muertes entre asalariados descienden en un 7,4%) y 62 eran
trabajadores por cuenta propia.
La secretaria
de Salud Laboral y Medio Ambiente de UGT, Ana García de la Torre,
considera que el auge del servicio a domicilio, mensajería y las
malas condiciones asociadas a este sector “repercute directamente en
la seguridad y salud de los trabajadores y advierte también que la
precariedad laboral desemboca en situaciones de estrés laboral,
ansiedad y depresión que en casos crónicos pueden llegar a propiciar
los infartos o derrames cerebrales”.
La secretaria
de Salud Laboral del sindicato alerta “del escaso reconocimiento de
aquellas enfermedades profesionales causadas por agentes
cancerígenos (hasta noviembre de 2019 solo se registraron 53, de las
cuales 31 fueron provocadas por el amianto)”.
Ana García de
la Torre demanda a los poderes públicos que actúen sobre la
infradeclaración de los cánceres de origen profesional y que se
incluyan las patologías de origen psicosocial en el cuadro de
enfermedades profesionales. Costes que ahora asume el sistema
Público de Salud, cuando lo deberían asumir las Mutuas colaboradoras
de la Seguridad Social.
Por último,
exige el desarrollo de la figura del delegado de prevención, única
manera de llevar la cultura de la prevención a las empresas más
pequeñas en las que no existe representación sindical.
Numero de
fallecidos
El mayor número
de fallecimientos de asalariados ocurridos durante la jornada
laboral se produjo en el sector servicios con 191 muertes
(disminuyen un 19%, respecto al mismo periodo del año anterior),
seguido de la construcción con 87 (aumentan un 14,5%) y el sector
agrario con 32 fallecimientos.
Por otra parte,
las causas más frecuentes de muerte por accidente laboral son los
infartos y derrames cerebrales con 172 fallecimientos y los
accidentes de tráfico con 179.
Economía
colaborativa
Por otra parte,
la mal llamada Economía colaborativa y las malas condiciones
asociadas a este sector repercute directamente en la seguridad y
salud de los trabajadores, causándoles incluso la muerte. Los plazos
ajustados, el exceso de carga de trabajo, las malas condiciones de
los vehículos están implicados en el aumento de las cifras de
siniestralidad.
Asimismo, el
estrés laboral se ha convertido en una pandemia, estando presente en
todas las profesiones y centros de trabajo, desencadenando problemas
de ansiedad, depresión, etc. que, en casos crónicos, pueden llegar a
propiciar los infartos o derrames cerebrales entre los trabajadores
que lo padecen.
Enfermedades
Profesionales
Por otro lado,
las enfermedades profesionales registradas hasta el mes de noviembre
ascienden hasta las 25.503, un 13,28% más que las registradas hasta
el mes de noviembre de 2018. 13.371 de las cuales no causaron la
baja del trabajador, mientras que 12.132 sí que causaron baja. El
52% de las enfermedades profesionales registradas se dieron entre
mujeres.
El 85% de las
enfermedades profesionales se enmarcan en el Grupo 2 “Enfermedades
profesionales causadas por agentes físicos”, entre las que se
encuentran las patologías asociadas a los trastornos musculo
esqueléticos.
Otro aspecto
que merece la pena destacar es el escasísimo reconocimiento de
aquellas enfermedades profesionales causadas por agentes
cancerígenos y que están encuadradas dentro del Grupo 6 de la
clasificación. Hasta el mes de noviembre de 2019, únicamente han
sido registradas 53 enfermedades profesionales causadas por agentes
cancerígenos, de las cuales 31 fueron provocadas por el amianto.
Por lo tanto, y
aunque la declaración de las enfermedades profesionales, en términos
generales, se está incrementando, permanece una, ya tradicional,
infradeclaración de estas, sobre todo en aquellas relacionadas con
los canceres ocupacionales. Por Agustín Millán
(diario16.com)
- 01/01/2020
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El 65%
de materiales con asbesto agotará su vida útil en 2020
PAMPLONA - Unas mil empresas presentan
planes de trabajo para eliminar amianto cada año en España, según la
Comisión Nacional de Seguridad y Salud. Pero, el Registro de
Empresas con Riesgo por Amianto (RERA) contabiliza 5.000 compañías
capacitadas para desarrollar estos procesos. "Resulta extraño, pero
muchas organizaciones hacen muy pocos trabajos, igual uno cada dos o
tres años o ninguno", cuenta Gonzalo Zufía Álvarez, presidente de la
Asociación de Empresas de Desamiantado, que asistió a una jornada
del Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra.
Zufía
contabiliza entre 3.000 y 4.000 materiales con amianto. "A pesar del
volumen, la sociedad se centra en dos, en aquellos que se ven, como
la uralita en los tejados y las tuberías de fibrocemento", destaca.
Zufía cita varios ejemplos de materiales que contienen este mineral
detectados en lugares como los que aparecen en las fotografías de
esta información: jardineras en colegios, suelos de vinilo en
residencias, objetos de laboratorios, depósitos de agua o juntas de
un quemador de caldera, etc. En una nota, el Gobierno de Navarra
indica que si los materiales con amianto están intactos conviene no
retirarlos, a no ser que se adopten las medidas adecuadas para ello,
porque su eliminación debe ser realizada por personal de empresas
del RERA.
Las propiedades que posee este mineral (resistencia
mecánica, incombustibilidad o aguante al ataque químico) y su
elevado interés constructivo e industrial explica su amplio uso
entre los años 50 del siglo XX y hasta su prohibición en España en
2002. La vida útil del fribrocemento está estimada entre los 30 y
los 50 años, por lo que urge intervenir sobre los materiales con
amianto, ya que para "2020 el 65% de los materiales instalados habrá
agotado la vida útil, en 2030 lo habrá hecho el 87%, y en 2040, el
100%", recuerda el Gobierno. "El plan director recoge propuestas de
actuación para eliminar de manera segura el amianto, para
identificar y valorar el material y para evaluar los riesgos
laborales y así garantizar la seguridad y la salud de los
trabajadores aplicando criterios técnicos y legales para la retirada
y la gestión segura de los residuos", aclara el Ejecutivo.
El
amianto o asbesto se designa a un conjunto de silicatos de magnesio,
fibrosos, sustancias de origen mineral y composición química
variable, cuya rotura o trituración libera fibras con efectos
negativos sobre la salud. Es precisamente el hecho de que producen
liberación de fibras lo que provoca un riesgo que no existe si el
material no se manipula. "La presencia de materiales con amianto no
implica necesariamente riesgo, ya que solo su inadecuada
manipulación, degradación y consecuente dispersión de fibras puede
generarlo", concluye. SAGRARIO ZABALETA ECHARTE
(noticiasdenavarra.com) 26 desembre
Es constitueix la
Comissió
per a l'Erradicació de l'Amiant
a Catalunya (CEAC)
-- L’objectiu principal de la CEAC és l’impuls per a
l’elaboració d’un Pla Nacional per a l’Erradicació de l’Amiant
-- Fins que aquest Pla no estigui elaborat, la CEAC
estudiarà quines mesures cal prendre a curt termini, les
facilitarà i vetllarà per la seva implantació.
El Govern ha constituït aquest migdia la Comissió per a
l’Erradicació de l’Amiant de Catalunya (CEAC), que té com a
objectiu principal impulsar totes les accions necessàries per
eliminar definitivament la presència d’aquesta substància tòxica
l’any 2032, d’acord amb el termini màxim establert pel Comitè
Econòmic i Social Europeu (CESE) de la Unió Europea. Amb l’acte
d’avui, es dona compliment a l’acord aprovat pel Govern el 22
d’octubre passat, que instava a crear la Comissió en un termini
màxim de dos mesos.
L’erradicació de l’amiant és un repte de país que requereix de
la implicació de totes les administracions catalanes,
institucions i sectors socioeconòmics, ja que afecta directament
les persones i abraça múltiples àmbits, com la salut pública, la
salut laboral, residus, empreses, infraestructures, equipaments
públics i privats, medi ambient, subministraments, transports,
etc.
L’eliminació total de l’amiant és una qüestió complexa que
demana temps i grans consensos . Així, la Comissió treballarà
per avaluar la situació actual, identificar-ne tots els agents
implicats i establir-hi mecanismes de cooperació i control. En
aquest sentit, una de les gran fites de la comissió serà
l’impuls per a l’elaboració del Pla Nacional per a l’Erradicació
de l’Amiant.
Per aquest motiu, a la comissió constituïda avui hi participen
els departaments de Presidència; Vicepresidència i d’Economia i
Hisen-da; Treball, Afers Socials i Famílies; Salut; Territori i
Sostenibilitat; Empresa i Coneixement; Educació; així com
representats de l’Associació Catalana de Municipis i Comarques i
de la Federació de Municipis de Catalunya.
Aquesta primera sessió constitutiva ha comptat amb la presència
del viceconseller de la Presidència per al Desplegament de
l'Autogovern, Pau Villòria, que exerceix el càrrec de president
de la Comissió; el secretari de Salut Pública, Joan Guix, que
n’és el vicepresident; la responsable de Coordinació i Seguiment
de Projectes Estratègics del Comissionat de la Presidència per
al Desplegament de l’Autogovern, Consol Cervera, que ha estat
designada secretària de la Comissió; i el director general de
Centres Públics, Josep Gonzàlez-Cambray; el sub-director general
del Patrimoni Mobiliari i Immobiliari; Lucas Castaño; el
sub-director general de Seguretat Industrial, Florenci
Hernàndez; el director de l’Agència Catalana de Residus, Josep
Maria Tost; la directora de l’Institut Català de Seguretat i
Salut Laboral, Elena Juanola, i el secretari general adjunt de
l'Associació Catalana de Municipis, Rafael de Yzaguirre, que hi
han participat en qualitat de vocals.
A part dels membres designats oficialment, el Govern ha convidat
altres representants per la seva rellevància i les seves
aportacions en la lluita per l’erradicació de l’amiant. Així, a
la reunió ha assistit Miguel Moreno, representant del Grup de
Jubilats Macosa-Alstom afectats per l’amiant, associació amb qui
el president Torra es va reunir el 21 de novembre passat, una
trobada en la qual van lliurar 10.000 signatures de suport a un
manifest que demanava que les administra-cions actuessin per
erradicar l’amiant, així com altres mesures en relació amb els
efectes de la seva exposició a les persones. Altres convidats
han estat el secretari general de Treball, Josep Ginesta; la
directora general de Coordinació Interdepartamental, Ester
Obach, i la Cristina Castells, representant de l’Ajuntament de
Barcelona.
La Comissió farà el seguiment i control de les actuacions a
realitzar per la comissió tècnica DESAMIANT-CAT, que s’haurà de
constituir durant les primeres setmanes del 2020, on podran participar
també totes les administracions i agents que la Comissió
determini i que tinguin competències o interessos perquè hi
estan afectats i que, si fos el cas, proposarà la creació de
grups de treball específics.
Per la importància que aquest tema té sobre les persones, i per
la complexitat i abast que l’exposició a fibres d’amiant té a
Catalunya, la Comissió ha decidit que és necessari abordar
mesures de caràcter urgent que no poden esperar a l’aprovació
del Pla Nacional i que permetin actuacions a curt i mig termini.
Entre els acords presos avui, destaca l’encàrrec a la Comissió
Tècnica DESAMIANT-CAT, d’identificar les actuacions que caldrà
prioritzar, per tal que siguin aprovades, si s’escau, en la
propera reunió de la CEAC.
Durant la reunió d’avui, també s’ha proposat la creació del Grup
de Treball Impulsor, que farà la coordinació i seguiment
d’aquest projecte.
Cal recordar que les accions de la Comissió i els objectius que
perse-gueix han d’estar alineats amb la normativa europea que
promou l’eliminació segura de l’amiant; així com amb les
propostes recollides a l’informe sobre l’exposició laboral a
fibres d’amiant a Catalunya, de desembre de 2018, elaborat de
forma concertada per la Generalitat de Catalunya i els agents
socials membres de la Comissió de Seguretat i Salut Laboral del
Consell de Relacions Laborals de Catalunya.
L’amiant a Catalunya
A Catalunya encara hi ha més de quatre milions de tones de
fibroci-ment i entre unes sis i trenta mil tones de projectats i
calorifugats, entre d’altres materials. Una gran part d’aquests
materials es van instal·lar entre mitjans dels anys 60 i finals
dels anys 80 i, per tant, han arribat o estan arribant al final
de la seva vida útil, però el risc d’alliberar fibres
contingudes als materials d’amiant pot donar-se per
l’envelliment i deteriorament de les instal·lacions, encara que
no hagin esgotat les seves característiques funcionals.
L’any 2001 es va prohibir la utilització, la producció i la
comercialitza-ció de l’amiant a Catalunya, però aquesta
restricció no afectava els materials ja instal·lats, ja que
l’obligació legal de retirar l’amiant només s’aplica a aquells
materials que ja han arribat al final de la seva vida útil.
A Catalunya, fa més de trenta anys que es duen a terme
actuacions a diferents nivells, amb l’objectiu d’eradicar la
presència d’amiant. Totes les administracions públiques
catalanes destinen recursos amb la finalitat d’eliminar aquest
agent químic, tant a nivell municipal o supra-municipal. Alguns
exemples són el “Pla d’Acció de l’Àrea Metropolita-na de
Barcelona”, aprovat a l’abril de 2019, per a la retirada de
l’amiant a 36 municipis, o els treballs realitzats per a la
detecció de l’amiant per part de l’Observatori de l’Habitatge de
Barcelona”.
La situació a Europa
La Unió Europea ha posat terminis a l’erradicació de l’amiant a
través de Resolucions del Parlament i dictàmens. La primera data
límit és el 2028 i afecta els centres públics o d’utilització
massiva, que aquell any hauran d’estar lliures d’amiant. Per a
la resta d’infraestructures, el termini màxim és el 2032.
Alguns països, com Polònia, han aprovat ja el seu Pla Nacional
per a l’Erradicació de l’Amiant. A l’Estat espanyol, el Govern
de Navarra ha aprovat un Pla d’acció integral plurianual a 12
anys amb un cost estimat d’uns 245 milions d’euros.
(gobern.cat) 17 desembre
El
amianto, mineral cancerígeno, llegó a usarse hasta en 4.000
materiales
El Instituto de Salud
Pública y Laboral de Navarra organiza una jornada, con más de cien
asistentes
PAMPLONA- Actualmente está prohibido el uso
del amianto, mineral cancerígeno, pero la ciudadanía convive con él
al estar presente en numerosos materiales. El presidente de la
Asociación de Empresas de Desamiantado (Anedes), Gonzalo Zufía
Álvarez, explicó ayer que las personas vinculan el asbesto a la
uralita, pero hay cifrados entre “3.000 y 4.000 materiales que lo
contienen”. Recordó que solamente es peligroso si se manipula,
porque la inhalación de sus fibras puede provocar enfermedades
décadas después.
Zufía participó en una jornada, organizada por el Instituto de Salud
Pública y Laboral de Navarra (ISPLN), centrada en identificar
amianto en materiales por un método específico. María Domínguez
Dalda y José María Rojo Aparicio, ambos del Instituto Nacional de
Seguridad y Salud en el Trabajo, intervinieron en esta convocatoria,
a la que asistieron 104 personas, de las que 60 fueron mujeres y 44
hombres.
Entre los perfiles, coincidieron profesionales de
mantenimiento del Gobierno de Navarra;técnicos de prevención de
riesgos laborales;arquitectos de empresas;miembros del Ayuntamiento
de Pamplona y de la empresa pública Nasuvinsa;agentes de la Policía
Nacional;integrantes de empresas de construcción y de la Fundación
Laboral;personal de Inspección de Trabajo y del propio
ISPLN;comunidades de vecinos, administradores de fincas, la
asociación de Víctimas de Amianto en Navarra (Ananar) y alumnado de
FP. - S.Z.
(noticiasdenavarra.co) 12 desembre 2019
URALITA es condenada a una
indemnización récord de 3,5 millones de euros
La Audiencia Provincial de Madrid impone a
la empresa URALITA S.A. el pago de 3,5 millones de euros a 14
vecinos afectados por la exposición al amiento proveniente de la
fábrica que la multinacional mantuvo operativa hasta 1997
Colectivo Ronda,
que ha representado a los 14 vecinos afectados a través de sus
letradas Esther costa y Esther Pérez, ha conseguido la mayor
indemnización impuesta hasta la fecha por tribunales españoles
contra URALITA S.A.: 3,5 millones de euros. La empresa fue, durante
décadas, el principal importador y productor de amianto del Estado.
La sentencia es
importante porque estos 14 vecinos se vieron afectados por la
inhalación de las fibras de asbesto (amianto) en su ámbito
doméstico, sin mantener relación laboral con la empresa. En algunos
casos fue por convivir con familiares que sí trabajaban en URALITA
(y que volvían a su casa con la ropa de trabajo impregnada de
amianto). En otros casos, por tener fijada su residencia o lugar de
trabajo en las inmediaciones de la fábrica de URALITA.
La sentencia
recoge el criterio exhibido con anterioridad por el Tribunal
Supremo, para certificar que “Uralita, conociendo el peligro que
conllevaba la utilización e inhalación de fibras de amianto, no
actuó con la diligencia exigible al emitir sin el control adecuado
al ambiente exterior las fibras de amianto de su explotación
industrial, con lo que incurrió en responsabilidad civil de carácter
extracontractual por los daños causados en las poblaciones
circundantes de Cerdanyola y Ripollet al inhalar sus habitantes las
fibras de amianto emitidas al ambiente exterior sin el debido
control”.
Exposición en el ámbito doméstico
La sentencia de la Audiencia Provincial de
Madrid confirma la resolución previa del Juzgado de Primera
Instancia número 5 de Madrid que, en septiembre de 2018, dictó
sentencia apreciando la responsabilidad de URALITA S.A por las
patologías vinculadas a la inhalación de fibras de amianto que
padecieron estos 14 vecinos de Cerdanyola y la localidad vecina de
Ripollet (Barcelona).
Según Esther
Pérez, una de las abogadas de Colectivo Ronda que han asesorado a
los afectados y sus herederos en el proceso de reclamación, “esta
nueva sentencia, unida a la que dictara previamente la propia
Audiencia Provincial de Madrid en diciembre de 2017 a instancias de
nuestro despacho, solidifica el criterio de la responsabilidad de
URALITA por las patologías que derivan de la exposición ambiental y
doméstica al amianto expulsado de forma temeraria e incontrolada al
exterior por la empresa, ya fuera adherido a la ropa de trabajo de
sus empleados, cuya limpieza correspondía a la empresa sin que así
lo hiciera, o vertiéndolo directamente al ambiente, poniendo en
riesgo la salud de todas las personas que vivían o trabajaban en un
área cercana a la fábrica, la mayor de cuantas Uralita poseía en el
Estado”.
Así lo acredita la sentencia de la
Audiencia Provincial cuando afirma, categóricamente, que “si no
hubieran [las víctimas] lavado la ropa de trabajo de sus familiares
contaminadas por tal material, si no hubieran habitado en la
proximidad de las instalaciones fabriles de la demandada no habrían
contraído esa enfermedad, aunque fumaran, trabajaran con
galvanizados o se emplearan como torneros, o al menos no existe
prueba alguna de ello, ni tan siquiera de que fuera concausa”.
Es por ello que la
sentencia, al hilo de la doctrina consolidad por el Tribunal
Supremo, certifica que “los demandantes o sus causantes han
presentado exposición doméstica, ambiental, o ambas a la vez” y por
ello “entendemos que lo razonable es atribuir causalidad en la
contracción de las enfermedades o en la aparición de las placas
pleurales a la actividad industrial desarrollada por la demandad en
la fábrica de Cerdanyola con la fabricación de fibrocemento”.
Una actividad que
URALITA no acompañó, pese a la plena conciencia respecto a la
peligrosidad de sus actos para los trabajadores y vecinos, “de la
diligencia requerida [que] exige todas las medidas necesarias para
prevenir el evento dañoso, no sólo las reglamentarias y de la prueba
practicada por las demandadas no se deduce que esas medidas
adicionales se tomaran, y si se hizo no fueron suficientes como
puede observarse por las consecuencias”.
Víctimas
domésticas y ambientales
“Nuestro despacho -afirma Esther Costa,
abogada de Colectivo Ronda que integra el equipo jurídico
responsable de la sentencia- ha llevado más de 500 casos
relacionados con víctimas del amianto, de los cuales más de 400
tienen relación con la exposición al asbesto vinculada a las
fábricas de Uralita. Afortunadamente, después de llegar al Tribunal
Supremo en reiteradas ocasiones, se ha conseguido que ya no se
discuta la responsabilidad de la empresa en las enfermedades y las
numerosísimas muertes entre los trabajadores que estuvieron en
contacto con este material hasta su completa prohibición en España
en 2002”.
El problema, explica Costa, es que
“todavía queda un largo camino por recorrer para alcanzar el mismo
nivel de reconocimiento judicial de la responsabilidad de Uralita
respecto a las víctimas domésticas y, sobre todo, las ambientales.
Hablamos de miles y miles de personas que han estado expuestas a un
gran riesgo para su salud como consecuencia del evidente menosprecio
de la empresa hacia su deber de seguridad y protección”.
(https://www.lawyerpress.com/) 6 noviembre 2019
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Inician un estudio para encontrar
tratamientos más eficaces contra el cáncer pulmonar causado por el
amianto
La asociación ANANAR
ha entregado una donación a la Clínica Universidad de Navarra para
financiar una investigación sobre las características inmunitarias
del mesioteloma.
Especialistas de la Clínica Universidad de
Navarra (CUN) han iniciado una investigación para “establecer el
tipo de células inmunitarias presentes en el mesotelioma, un tipo de
cáncer pulmonar relacionado con la inhalación de amianto (asbesto)
durante un tiempo prolongado.
Conocidos los tipos celulares
del sistema inmune más frecuentes en este tumor, se podrían
establecer después las principales dianas para combatirlo
eficazmente mediante inmunoterapia”, informó ayer la Asociación
Navarra de Amianto, Nuevo Amanecer Respirando (Ananar), que ha
aportado los fondos necesarios para comenzar dicho estudio.
El análisis, según explicaron en una nota de prensa, lo desarrolla
un equipo multidisciplinar, integrado por los doctores Miguel
Fernández de Sanmamed y Alfonso Gúrpide, ambos especialistas del
departamento de Oncología Médica de la CUN, Ignacio Melero,
codirector servicio de Inmunología e Inmunoterapia e investigador
senior del Cima, Mª Dolores Lozano, directora de Anatomía
Patológica, y Carlos E. de Andrea, investigador y profesor del
departamento de Patología, Anatomía y Fisiología de la Universidad
de Navarra.
Fernández de Sanmamed, investigador principal,
observó que “el inicio de este estudio se produce en un momento muy
adecuado ya que se espera ahora un pico de incidencia de la
enfermedad”.
En este sentido, en el comunicado explicaron que
“el mesotelioma es un tumor con un periodo de desarrollo muy
prolongado que puede tardar en manifestarse unos 20 años. Este plazo
de tiempo que se cumple ahora tiene que ver con la fecha de
prohibición de la utilización de este material en Estados Unidos,
principal país productor y exportador”.
La presidenta de
Ananar, Mª Asun Fernández Osés, cuyo marido falleció recientemente
por esta enfermedad, indicó que el inicio del estudio ha sido
posible gracias a la concesión de las primeras indemnizaciones de
EEUU a pacientes españoles que trabajaron con este material. “Somos
pioneros en nuestro país en recaudar fondos para desarrollar este
tipo de estudios y hemos sido también pioneros en percibir las dos
primeras indemnizaciones de EEUU”, señaló la presidenta.
(https://navarra.elespanol.com/articulo/sociedad/inician-estudio-encontrar-tratamientos-mas-eficaces-cancer-pulmonar-causado-amianto/20190716180859279370.html)
Nueva sentencia que declara el
mesotelioma de un afectado por amianto como enfermedad profesional
(10-7-2019) La reciente Sentencia dictada por el Juzgado de lo
Social nº 21 de Madrid, ha reconocido la enfermedad profesional a un
trabajador electricista.
C. Guillén. de 61 años, comenzó a
trabajar como electricista en 1975 en distintas empresas donde
estuvo en contacto constante con el amianto ya que era el protector
de muchos motores y cableados en aquella época. Estaba así en
contacto con planchas de amianto blanco que se usaban como
protectores de mesas de trabajo para calentar rodamientos, motores,
etc. También usaba utensilios de baquelita, uno de cuyos componentes
es el amianto.
Al haber manipulado manual y directamente los
elementos que estaban fabricados con fibras de asbesto durante toda
la etapa laboral en distintas empresas, la exposición al amianto fue
continua y prolongada en el tiempo.
Prueba de la exposición
al amianto es que en el año 2017 se le diagnostica mesotelioma
maligno, enfermedad que puede estar latente entre 20 y 40 años desde
que se inició la exposición, habiendo sido esta normalmente intensa.
Como consecuencia de dicha enfermedad el Sr. Guillén se encuentra
recibiendo tratamiento oncológico siendo la previsión de su
enfermedad de pésima evolución a la vista de la malignidad del tumor
hallado.
Esto supone una victoria de la firma Oria, Pajares &
Asociados en un caso no exento de dificultad por las circunstancias
concretas del caso al haber prestado servicios para distintas
empresas. Sentencia favorable para los afectados por el amianto que
no sólo tienen que luchar contra los efectos de las enfermedades que
dicho cancerígeno material provoca, sino contra las dificultades que
supone su prueba en los Tribunales.
https://www.nuevatribuna.es/articulo/actualidad/sentencia-mesotelioma-amianto-enfermedadprofesional/20190710125054164381.html
Inician un estudio para
encontrar tratamientos más eficaces contra el cáncer pulmonar
causado por el amianto
Especialistas de la
Clínica Universidad de Navarra han iniciado una investigación para
establecer el tipo de células inmunitarias presentes en el
mesotelioma, un tipo de cáncer pulmonar relacionado con la
inhalación de amianto (asbesto) durante un tiempo prolongado.
Conocidos los tipos celulares del sistema inmune más frecuentes en
este tumor, se podrían establecer después las principales dianas
para combatirlo eficazmente mediante inmunoterapia. La investigación
surge como iniciativa de la Asociación Navarra de Amianto, Nuevo
Amanecer Respirando (ANANAR), desde donde han aportado los fondos
necesarios para comenzar dicho estudio.
El análisis lo
desarrolla un equipo multidisciplinar, integrado por el Dr. Miguel
Fernández de Sanmamed junto al Dr. Alfonso Gúrpide, ambos
especialistas del Departamento de Oncología Médica de la Clínica
Universidad de Navarra, el Dr. Ignacio Melero, codirector
Servicio de Inmunología e Inmunoterapia de la Clínica e investigador
senior del Cima Universidad de Navarra, la Dra. Mª Dolores Lozano,
directora del Anatomía Patológica y el Dr. Carlos E. de Andrea,
investigador y profesor del Departamento de Patología, Anatomía y
Fisiología de la Universidad de Navarra.
La Clínica ha sido
uno de los centros de referencia para el tratamiento del mesioteloma
por lo que cuenta con una serie de más de 300 pacientes tratados,
cuyo tejido tumoral someterán a estudio para obtener las primeras
conclusiones de esta investigación.
Pico de incidencia del
mesioteloma
Localizado en la pleura (membrana que recubre los
pulmones), el mesioteloma está estrechamente vinculado con la
exposición al amianto (asbesto). Se sabe que la inhalación de este
mineral (presente, por ejemplo, en los antiguos tejados de uralita)
durante un periodo largo de tiempo tiene una elevada implicación en
el desarrollo de la enfermedad. Normalmente, las personas afectadas
han trabajado o vivido en ambientes en los que el amianto ha estado
presente de forma permanente. De ahí que este tumor tenga
consideración de enfermedad profesional.
En la actualidad,
el mesioteloma es un cáncer sin tratamientos eficaces, del que hasta
la fecha se ha desarrollado escasa investigación dado que su
aparición se circunscribe prácticamente a personas que han vivido
esta circunstancia.
“El inicio de este estudio se produce en
un momento muy adecuado ya que se espera ahora un pico de incidencia
de la enfermedad”, observa el Dr. Fernández de Sanmamed,
investigador principal. El mesioteloma es un tumor con un periodo de
desarrollo muy prolongado que puede tardar en manifestarse unos 20
años. Este plazo de tiempo que se cumple ahora tiene que ver con la
fecha de prohibición de la utilización de este material en Estados
Unidos, principal país productor y exportador.
Este estudio
“puede constituir la primera piedra de posteriores investigaciones
más extensas, ya que el análisis de una serie tan amplia de tumores
nos permitirá obtener conclusiones acerca de qué tipo de células
inmunes están presentes en el tejido del mesioteloma y cuáles son
las vías que con mayor frecuencia aparecen alteradas”.
El
modelo de trabajo que siguen los investigadores es el denominado
TMAs (Tissue Microarrays), “una técnica de cierto nivel de
complejidad pero que nos permitirá tener representados y por tanto
poder estudiar de una sola vez los 300 tumores diferentes de la
serie, en lugar de tener que ir uno por uno y obtener de una forma
más rápida las conclusiones perseguidas”.
La presidenta de
la ANANAR, Mª Asun Fernández Osés, cuyo marido falleció
recientemente por esta enfermedad, explicó que el inicio de este
estudio ha sido posible gracias a la concesión de las primeras
indemnizaciones de Estados Unidos a pacientes españoles que
trabajaron con este material importado del país americano.
Conscientes de la situación de pico de la enfermedad, desde ANANAR
han querido impulsar esta investigación. “Somos pioneros en nuestro
país en recaudar fondos para desarrollar este tipo de estudios y
hemos sido también pioneros en percibir las dos primeras
indemnizaciones de Estados Unidos”, señaló la presidenta.
Actualmente, hay 15 casos más pendientes de resolución.
ANANAR se creó en octubre de 2016, a raíz de diagnosticar a José
María Esteban Marcos, ya fallecido en noviembre de 2017, un
mesotelioma pleural. En la actualidad, la asociación cuenta con 91
socios. Sus principales objetivos son recaudar fondos para la
investigación de este cáncer que no tiene cura, asesorar e informar
a los afectados y darles acogimiento tanto a ellos como a sus
familiares.
En definitiva, luchar contra el mesioteloma, una
enfermedad actualmente huérfana de tratamiento eficaz, circunscrita
al ámbito laboral, y que vive hoy un pico de su incidencia. “Nuestro
objetivo final es mejorar la investigación y el tratamiento de este
tumor”, coincide en señalar el Dr. Fdez. Sanmamed.
https://pamplonaactual.com/inician-un-estudio-para-encontrar-tratamientos-mas-eficaces-contra-el-cancer-pulmonar-causado-por-el-amianto/
Condenan a Uralita a pagar
167.400 euros como responsable de la muerte de uno de sus operarios.
La jueza considera acreditado que contrajo
cáncer por amianto tras estar 13 años en la fábrica.
Valladolid. El Juzgado de lo Social número
2 de Valladolid ha condenado a Uralita (actualmente Corporación
Empresarial de Materiales de Construcción S. A.) a pagar 167.434
euros a la viuda de un trabajador y a sus tres hijos, por su
«responsabilidad empresarial» en la muerte de uno de sus operarios,
que estuvo empleado durante 13 años en la factoría que esta compañía
tuvo en Valladolid.
El fallecimiento fue causado por un
mesotelioma pleural, un tumor canceroso que le afectó al
revestimiento del pulmón y de la cavidad torácica (pleura), y que
fue debido a una exposición prolongada a los asbestos, que fueron
inhalados durante años.
Esta sustancia, que es altamente
nociva para la salud, se encontraba en la fabricación de placas de
fibrocemento, que se producían en la sede que Uralita tuvo en la
carretera de Madrid.
Según los hechos probados, recogidos en
la sentencia del pasado 14 de enero, el trabajador, A. C.Ch., había
prestado sus servicios en la planta de Valladolid desde marzo de
1969 a abril de 1982. Uralita venía utilizando el amianto en la
producción, «una sustancia con la que el trabajador estuvo en
contacto directo, sin que por parte de la empresa, hasta el año
1978, se efectuaran mediciones del grado de concentración de amianto
en el ambiente».
Inspección de Trabajo Fue a partir de una
Inspección de Trabajo, realizada el 6 de febrero de 1979, cuando la
compañía implantó extractores, filtros, elevó los tubos de escape de
las carretillas de transporte y acometió una serie de inversiones
para prevenir a todo su personal del polvo que generaban las fibras
de amianto. Sin embargo, el laboratorio central especializado no se
homologó hasta 1989.
En mayo de 2014, una resolución de la
Seguridad Social declaró al trabajador la incapacidad permanente
absoluta, derivada de una enfermedad profesional, conclusión a la
que se llegó después de analizar el cuadro clínico por mesotelioma
pleural izquierdo que sufría.
Esta enfermedad le fue
diagnosticada en abril del 2013, y su progresión derivó en el
fallecimiento del operario en junio de 2014.
A instancia de
su viuda, el Juzgado de lo Social número 3 de Badajoz, provincia en
donde pasó los últimos años el exoperario, reconoció en sentencia de
marzo de 2017 un recargo del 40% de las prestaciones por
incapacidad.
Precisamente, este fallo de Extremadura es el
que ha servido a la familia para promover este pleito laboral por
daños y perjuicios por responsabilidad civil contra la empresa, a la
que la magistrada atribuye un «incumplimiento de las obligaciones
preventivas por parte del empresario y las lesiones» que se causaron
al trabajador.
«Es precisamente el incumplimiento de la
normativa, vigente durante toda la vida laboral del actor, la causa
determinante del recargo de prestaciones» fijadas por la Seguridad
Social, sostiene la jueza, que fija la cantidad indemnizatoria de
167.434 euros de acuerdo con las cuantías que establece el Baremo de
Tráfico, actualizado a enero de 2018.
Aunque por parte de la
defensa de Uralita se argumentó que había caducado la reclamación
por este fallecimiento, al haber pasado el plazo de un año desde el
mismo, la jueza lo rechaza al considerar que la familia dirigió
varios escritos sin éxito a la empresa en 2015, 2016 y 2017, previos
a la presentación de la demanda en enero de 2018.
La
sentencia es firme ya que la empresa no ha recurrido ante el
Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León. Jorge Moreno.
(elnortedecastilla.es) 20 febrer
Morir por lavar y planchar
la ropa de hombres que trabajaban con amianto
* El Tribunal Supremo confirma una indemnización de 260.000
euros a familiares de cuatro mujeres de Getafe fallecidas por
amianto
* El Alto Tribunal entiende que las mujeres
enfermaron al inhalar polvo de amianto al tratar la ropa de trabajo
de sus maridos, empleados de la fábrica Uralita
La Sala de lo
Civil del Tribunal Supremo ha confirmado una indemnización de unos
260.000 euros a diez familiares de cuatro mujeres fallecidas por
amianto, cuyos maridos trabajaron en la fábrica de Uralita en Getafe
al entender que "las enfermedades padecidas por las esposas de los
cuatro trabajadores de Uralita tuvieron una relación causa-efecto en
la inhalación de polvo de amianto al lavar y planchar ropa de
trabajo de sus maridos".
Así, el Alto Tribunal inadmite los
recursos de casación y extraordinario por infracción procesal
interpuestos por la representación de la empresa contra la sentencia
dictada el 5 de abril de 2016 por la Audiencia Provincial de Madrid.
La primera sentencia de este proceso fue en enero de 2015
por parte del Juzgado de Primera Instancia número 38 de Madrid, que
condenó a Uralita a indemnizar con 281.948 euros a 11 familiares de
las mujeres de cuatro trabajadores de la factoría de Getafe,
fallecidas por inhalación de polvo de amianto entre 2011 y 2013,
aunque la Audiencia Provincial dejó fuera de las indemnizaciones en
2016 a uno de los beneficiarios.
Además, recogiendo los
términos de la sentencia de primera instancia que asume el tribunal
de apelación, se concluye que la empresa "no ha acreditado
suficientemente que adoptara, no ya las medidas a que legalmente
viniera obligada, sino aquellas que conforme a los conocimientos
habidos en el momento en el que debieron producirse los hechos
litigiosos, entre 1962 y 1992, debían haberse adoptado".
Asimismo, se señala que la actividad productiva se desarrollaba con
materiales "que conocía ya desde al menos 1940 eran especialmente
peligrosos, no habiendo probado desde luego la misma en forma
suficiente, a juicio del tribunal de apelación, la eficacia de las
medidas de seguridad al efecto adoptadas por ella para evitar en lo
posible la existencia de fibras de amianto, al no constar en los
autos prueba pericial al efecto".
El Tribunal considera que
tampoco se adoptaron medidas en materia de prevención y seguridad e
higiene tendentes a evitar una inhalación, "no ya solo por parte de
los trabajadores, sino igualmente por parte de aquellas personas que
sabían que podían entrar en contacto con fibras de amianto,
inhalando su polvo, en tanto que quedaban adheridas a la ropa de sus
trabajadores, por ocuparse del lavado y cuidado de la misma".
"Y ello no solo respecto de la ropa de trabajo, sino incluso de
la ropa de calle que durante mucho tiempo se dejó en la misma
taquilla que la ropa de trabajo, no constando a la Audiencia, cuándo
instaló Uralita taquillas diferenciadas para guardar una y otra
ropa", añade el auto.
La primera sentencia de este proceso
fue en enero de 2015 por parte del Juzgado de Primera Instancia
número 38 de Madrid, que condenó a Uralita a indemnizar con 281.948
euros a once familiares de las mujeres de cuatro trabajadores de la
factoría de Getafe, fallecidas por inhalación de polvo de amianto
entre 2011 y 2013, aunque la Audiencia Provincial dejó fuera de las
indemnizaciones en 2016 a uno de los beneficiarios. Europa Press
(eldiario.es) 7 gener
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Las víctimas del amianto reclaman
justicia en Barcelona
Los afectados por el mineral
prohibido piden a la administración que reconozcan sus enfermedades.
Las víctimas del amianto se han
concentrado este sábado en la plaza de Sant Jaume para hacer visible
su reclamación, que incumbe a toda la sociedad.
Decenas de
personas han llegado a las 11h de la mañana a la plaza del
Ayuntamiento, donde se han unido con otras tantas, ligadas a algunos
colectivos que trabajan por la inertización de este mineral
declarado cancerígeno por la Organización Mundial de la Salud (OMS)
en 1977. Entre los carteles de su reivindicación, se podía leer
'Basta' y 'El amianto sigue matando'.
Su principal objetivo
es que las administraciones públicas reconozcan sus enfermedades
crónicas como un daño colateral de sus años de trabajo en centros
industriales durante las décadas de los 60', 70 y 80', donde
manipulaban amianto sin (o con escasas) medidas de protección
También preclaman que se reconozcan las enfermedades de sus
familiares directos derivadas del amianto, que han tenido contacto
con este material de bajo coste o las personas que han vivido y aún
viven cerca de un foco de producción de este mineral cancerígeno.
Desde el Colectivo Ronda, formado por abogados, han obtenido
algunas sentencias favorables a sus demandas. La última, el 8 de
septiembre, condenaba a la empresa Uralita a indemnizar con 1,7
millones de euros a 14 vecinos de los municipios de Cerdanyola del
Vallès y Ripollet.
La convocatoria de esta mañana, organizada
por l'Associació de Víctimes Afectades per l'Amiant de Catalunya
(AVAAC) y el Colectivo Ronda ha contado con la presencia de algunos
afectados que han llegado desde Francia, Inglaterra, Italia y
Bélgica.
EL AMIANTO, PROHIBIDO DESDE 2002
La
producción y el consumo de amianto se prohibió en España en 2002
pero las consecuencias de la exposición de este material despiertan
ahora, dado que los síntomas tardan entre 20 y 40 años en
manifestarse. Así, se han retrasado hasta ahora las consecuencias de
su exposición.
Según un estudio de la Unión Europea, de aquí
a 2030 medio millón de personas morirán en Europa de cáncer por la
exposición al amianto. Solo la transformación de su estructura
cristalina lo hará seguro para posteriores generaciones.
AROA ORTEGA
(https://www.metropoliabierta.com/vivir-en-barcelona/victimas-amianto-justicia-barcelona_10753_102.html)
6/10/2018
LA ENFERMEDAD DE LA URALITA
España reconoce únicamente al
10% de enfermos por amianto
En 1947 se reconoció la enfermedad, pero los
infectados deben recurrir todavía a la vía judicial. En la Unión
Europea está prohibido desde el año 2000, pero muchos edificios
todavía lo tienen.
Dependiendo de cuál sea su edad,
la palabra amianto puede sonarle más o menos. El amianto (o asbesto)
es uno de los componentes del fibrocemento, un material de
construcción comercializado preferentemente por la empresa Uralita
SA, por eso ha sido conocido con este nombre. ¿Le suenan los tejados
de uralita? Eso es el amianto y si su casa ha sido levantada antes
del año 2000, probablemente contenga este material en cubiertas o
tuberías, pues ha sido usado, de manera masiva y durante décadas,
como aislante del calor y del fuego en edificios.
El amianto
está prohibido en toda la UE desde el 2000. Se ha demostrado que sus
fibras sueltas que llegan a los pulmones pueden causar enfermedades
graves, como cáncer de pulmón, mesotelioma (tumor de pleura cuya
única causa conocida es el amianto) o asbestosis (un tipo de
fibrosis pulmonar). No se alarme: aunque actualmente muchas
construcciones contienen amianto, solo aquellos materiales muy
degradados pueden suponer un peligro real para la salud. Países como
Francia obligan a certificar si la vivienda que se va a vender o
alquilar tiene o no asbesto.
Según la Organización Mundial de
la Salud (OMS), el amianto es el responsable cada año de más de
100.000 muertes en todo el mundo. Víctimas como extrabajadores de
los centros industriales donde se manipulaba este material
cancerígeno sin ningún tipo de protección, pero también familiares
suyos que estuvieron en contacto con las fibras (por ejemplo,
mujeres que lavaban la ropa de trabajo del marido) e, incluso,
vecinos que vivían cerca de un foco de producción.
La zona
cero del amianto en toda España se encuentra en Cerdanyola del
Vallés (Barcelona). Ahí estuvo, desde 1910 y hasta 1997, la fábrica
de Uralita. Por eso Cerdanyola ha sido elegida este año como lugar
de acogida del encuentro internacional de víctimas del amianto, que
se clausura hoy y está organizado por la Associación de Víctimas por
el Amianto de Cataluña y la cooperativa de abogados Colectivo Ronda.
«En 1925, Uralita tenía 325 trabajadores en plantilla. Cinco
años después, más del doble. Mucha gente vino a Cerdanyola a
trabajar en esta fábrica», señaló el alcalde del municipio, Carles
Escolá, el pasado jueves en la recepción institucional del evento.
Las cifras dan una idea del crecimiento de esta multinacional que
hace años cambió de nombre y actualmente se llama Corporación
Empresarial de Material de Construcción (Coemac).
«Se sabía
desde 1940 que el amianto era dañino y en 1947 se reconoció la
enfermedad de la uralita. ¿Por qué se siguió utilizando? Porque era
un material muy barato y muy bueno. Y no hay que olvidar que la
empresa sigue activa, ganando millones y millones», dijo por su
parte la abogada Raquel Lafuente. Esta cooperativa trabaja desde
hace más de 30 años en la defensa de los derechos de las personas
afectadas por la exposición al amianto y denunciando la falta de
medidas efectivas de protección.
Cerdanyola, Ripollet o
Castelldefels han sido importantes focos de contaminación no solo
para trabajadores de Uralita, sino también para familiares y
vecinos. Las enfermedades relacionadas con el amianto tardan entre
20 y 30 años en desarrollarse, por eso siguen apareciendo nuevos
casos de pacientes.
Hoy por hoy, el amianto solo está
prohibido en 50 países (entre ellos Estados Unidos y Canadá). En
zonas como India, Brasil o el norte de África no. La OMS advierte de
que cada año se comercializan unos 2,5 millones de toneladas de
amianto en todo el mundo. Hay 125 millones de trabajadores expuestos
al día.
Una de las problemáticas de la enfermedad del amianto
es la infradiagnosis en el ámbito de la Administración, que no
reconoce a esta como una enfermedad laboral. Se estima que España
solo reconoce menos del 10% de todos los casos que hay. Esto lleva a
muchos afectados por el amianto en España a verse obligados a
recurrir a la vía judicial para obtener las prestaciones.
Una
de las sentencias más importantes de los últimos años fue la del
Tribunal Supremo en el 2012, cuando este unificó doctrina y resolvió
que Uralita incumplió la normativa desde los 40. También en el
último año hubo avances: dos sentencias pioneras establecieron que
la empresa debe indemnizar a unos familiares y vecinos del entorno
de Uralita. Los identifica así como afectados pasivos ambientales.
BEATRIZ PÉREZ
(el periodicodearagon.com) 06/10/2018
https://www.elperiodicodearagon.com/noticias/sociedad/espana-reconoce-unicamente-10-enfermos-amianto_1314398.html
Los rostros del amianto: "Pintábamos
rayuelas con trozos de uralita"
Tres víctimas del asbesto explican cómo
les ha afectado vivir cerca de la fábrica del Vallès.
La fábrica de Uralita SA de Cerdanyola del
Vallès (Barcelona), que estuvo abierta desde 1910 a 1997, está
considerada hoy en día el 'punto cero' del amianto en España. Sus
empleados trabajaron, día tras día y durante décadas, sin ningún
tipo de protección pese a que España sabía, desde 1940, que el
amianto era dañino.
Cerdanyola del Vallès es estos días el
lugar donde se está celebrando el encuentro internacional de
afectados por el amianto (o asbesto), un material de construcción
que, según la OMS, causa la muerte de más de 100.000 personas al
año. Cánceres de pulmón y pleura y asbestosis (un tipo de fibrosis
pulmonar producida por el amianto) son las principales enfermedades
graves que han contraído quienes trabajaron aquí. Pero no solo ellos
estaban en peligro: también sus familiares y vecinos de la zona. La
enfermedad del amianto tarda entre 20 y 30 años en desarrollarse.
A continuación, tres víctimas del amianto explican a EL
PERIÓDICO sus testimonios, que reflejan la impunidad (y, también, el
gran desconocimiento que, pese a todo, tenía la población) que ha
habido siempre en torno a este material cancerígeno.
Maria Portí: "Los baches de las calles se tapaban con
uralita"
Josep Maria Andrés murió a los 71 años a
causa de un mesotelioma, un cáncer de pleura causado por el amianto.
Sucedió en febrero del 2017. En los años 60, cuando tenía solo 15
años, trabajó nueve meses en la fábrica de Uralita de Cerdanyola.
"Él inventariaba los motores eléctricos de la fábrica. Como no había
protección, estaban todos tapados con polvo de amianto. A mi marido
no le daban ninguna ropa especial: para poder ver el número del
motor, soplaba y apartaba el polvo con las manos", relata su viuda,
Maria Portí, vecina de Ripollet.
Además, el padre de Josep
Maria era trabajador de Uralita SA. "En aquella época, quienes
trabajaban ahí eran unos privilegiados. A diferencia de los payeses,
tenían un sueldo fijo al mes", relata Portí. Pero ese trabajo traía
consigo la exposición por convivencia de toda la familia: así fue
como Josep Maria estuvo cerca del amianto gran parte de su vida.
"Los que somos de Ripollet hemos visto toda nuestra vida cómo los
niños jugaban con los desechos de las tuberías y cómo los baches de
las calles se tapaban con uralita. Cuando pasaba un carro, había
grandes explosiones de polvos de amianto".
Al marido de Maria
Portí le diagnosticaron el cáncer a finales del 2015. "Luchamos 14
meses. El médico, cuando le hizo la biopsia, le preguntó si había
trabajado con algo tóxico. Él no se acordaba, pero yo le dije: 'Sí,
has trabajado en la Uralita'", recuerda Maria. Hoy, tanto ella como
sus hijos se encuentran en pleno proceso judicial para lograr una
indemnización y un recargo de prestaciones que incrementaría su
pensión entre un 30% y un 50%.
Julián del Amo:
"Cogíamos el amianto a puñados con las manos"
De los
20 a los 26 años, Julián del Amo trabajó en la fábrica de Uralita de
Cerdanyola. Ahora tiene 70 años y está enfermo a causa de aquella
actividad laboral. "Yo trabajé en las tuberías y en el patio, con
los camiones, de chófer en una grúa", relata Julián. "Me fatigo
mucho al andar y el médico me recomienda que tenga mucho cuidado
porque me resfrío con nada".
Hace solo siete años que en el
Hospital Parc Taulí de Sabadell (Barcelona) le reconocieron sus
dolencias: tiene asbestosis con una severa limitación pulmonar. Con
la ayuda del Col·lectiu Ronda, logró ganar siete juicios y conseguir
una indemnización.
"Al principio, los médicos de las
clínicas privas me decían que eso no tenía nada que ver con el
amianto", cuenta. Resultó que no. Como Maria Portí, recuerda cómo en
las calles de Cerdanyola "se cogía a puñados el amianto". "Lo
metíamos en sacos con las manos. Luego se mezclaba con cemento y
agua para hacer tubos y placas". Julián tiene reconocida una
incapacidad permanente absoluta.
Maria Mercè Duran:
"Nos tirábamos el amianto a la cara como si fuera nieve"
"Mi padre trabajó 30 años en la fábrica de Uralita y, aún
encima, nuestra casa estaba al lado de la fábrica. Él murió por
insuficiencia respiratoria en el hospital; mi madre y hermano, de
cáncer. Otra hermana y yo tenemos asbestosis", explica Maria Mercè
Duran, de 68 años y miembro de la Associació d'Afectats per Amiant
de Cerdanyola i Ripollet. La lucha de esta entidad, asegura, ha
conseguido que en el Taulí les hagan revisiones cada seis meses y
que arreglaran el camino de Can Catà, antaño "lleno de amianto".
Maria Mercè recuerda cómo, durante su niñez, las vías de
Cerdanyola eran de fango y el ayuntamiento pedía que "se echaran los
desechos de la uralita en las calles". Calles que luego pisaban sus
vecinos. "De niñas, cogíamos trozos de uralita y pintábamos en el
suelo una rayuela para luego jugar. Cogíamos los polvos de amianto y
nos los tirábamos a la cara, como si fuera nieve".
Esta mujer
también relata cómo su madre extendía en el patio de la casa las
sábanas y estas acababan repletas de polvo de amianto. Tras
sacudirlas, volvía a hacer la cama con ellas. Actualmente, junto a
otras familias, Maria Mercè lucha por conseguir una indemnización.
Beatriz Pérez
(elperiodico.com) 5/10/2018
https://www.elperiodico.com/es/sociedad/20181005/los-rostros-del-amianto-de-ninos-pintabamos-rayuelas-con-trozos-de-uralita-7072491
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Asbesto más que un enemigo mortal
un asesino silencioso
El asbesto o amianto,
resulta una bomba de tiempo mortal, no existe un nivel seguro de
exposición, este mineral fibroso se ha convertido en un legado
mortífero silencioso, que toma la vida de al menos 100,000 personas
al año por cáncer de pulmón, mesotelioma y asbestosis, según
estimaciones de la Organización Mundial de la Salud, 125 millones de
personas en el mundo se encuentran expuestas a este material.
Lamentablemente el principal sitio de entrada al cuerpo, es por
por la vía respiratoria, debido a que el asbesto se puede encontrar
fácilmente en el ambiente, tal como lo señaló el especialista en
neumología de la UdeG Gustavo Rosales; misma razón por lo que está
prohibido en más de 30 países, aunque en México el asbesto es
utilizado en la vida cotidiana y reemplazarlo,no es una opción.
Una cifra a destacar, es el medio millón de toneladas de asbesto
que se han importado durante el último siglo. Sin embargo, aún se
permite la manufactura de impermeabilizantes,sellos, balatas y
empaques, los cuales contienen amianto y son producidos en más de
180 empresas.El uso desmedido y la dificultad para sustituirlo por
otro material, se ha tornado complicado, misma razón por la que aún
se produce y se calcula que alrededor de los años 80, había
alrededor de 50 toneladas de asbesto.
Los daños por contacto
con asbesto, se ven reflejados después de 15 o 60 años ocasionando
una amarga realidad para las personas que caen enfermas por amianto,
o que han tenido una mala experiencia como es el caso de un bombero
de Guadalajara quien por motivos de seguridad no diremos su nombre
aunque explicó que al entrar a un incendio hace un par de años en
una fábrica que producía piedras artificiales, látex y materiales
con asbesto, el elemento de bomberos se intoxico a causa del humo y
por el amianto que se encontraba en demasía, por lo que decidió
salir rápidamente del incendio, posteriormente Cruz Roja le realizó
un barrido con oxígeno, años después las molestias continuaban en el
pecho y decidió realizarse un chequeo médico en el cual se le
menciona que sus problemas de salud fueron provocados por estar en
contacto con asbesto; la exposición de esta materia prima, se
produce por la inhalación de las fibras de este material conocidas
como: serpentinas y anfibolas.
Martha Patricia Pérez,
Coordinadora AUXILIAR de salud en el trabajo del Instituto Mexicano
del Seguro Social (IMSS) , señaló “El asbesto es un problema de
salud mundial pública, lógicamente ocupacional, porque son nuestros
trabajadores los que se exponen en más de un 90% de un colectivo,el
otro 10% es una exposición ambiental, tú, no trabajas en el área del
asbesto, pero si las fábricas o los lugares que están alrededor,
pueden estar emanando al ambiente fibras de asbesto”.
Los
primeros síntomas se presentan con la dificultad de la respiración,
una tos seca así como un ligero dolor en el pecho que podrían
confundirse con otras enfermedades. “Hay un 70% de subdiagnóstico,
que indica que los casos no están siendo detectados, entonces
realmente la mortalidad o Morbi mortalidad es muy importante”. Así
lo mencionó, Gustavo Rosales. Y aunque en México se detectan al año
2000 casos relacionados con este material, es momento de que no se
ha prohibido en México su uso hasta la fecha.
(http://talajalisconoticias.com/2018/04/27/asbesto-mas-que-un-enemigo-mortal-un-asesino-silencioso/)
25/4
Un nuevo fallo atribuye una
muerte por cáncer de pulmón con el amianto
El
Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (Tsjpv) ratificó el
origen profesional de la muerte por un cáncer de pulmón de un
calorifugador que trabajaba para Atefrisa, Aislamientos Térmicos y
Frigoríficos, por exposición laboral al amianto.
El alto
Tribunal vasco ha rechazó los recursos planteados por la empresa y
por la mutua Fremap contra la sentencia del Juzgado número 1 de
Bilbao que, en contra de lo que afirmó el Instituto Nacional de la
Seguridad Social (INSS) en una resolución, consideró que la
Incapacidad Temporal de Rafael G.V. y su muerte con 62 años en julio
2016 por un adenocarcinoma pulmonar, fue derivada de enfermedad
profesional por exposición laboral al amianto.
El fallecido
trabajó desde 1976 como calorifugador en Atefrisa, hasta que en
noviembre de 2015, causó baja enfermedad común, que derivó en su
muerte en julio 2016.
(laopinioncoruna.es/sociedad/2018/05/01/nuevo-fallo-atribuye-muerte-cancer/1287063.html)
1/5/18
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Las víctimas del amianto
presentan una guía sobre sus riesgos
► Los expertos alertan del impacto de
la exposición a este mineral en toda la sociedad
► En las próximas décadas se prevén 40.000 nuevas muertes por
sus efectos nocivos
La Asociación de Víctimas Afectadas por el
Amianto en Catalunya (AVAAC) ha presentado este miércoles en la
Universitat Pompeu Fabra la Guía informativa sobre los riesgos del
amianto, un documento dirigido a toda la población para conocer el
devastador efecto sobre la salud que puede representar la exposición
a este material.
Pese a que se cumplen 16 años desde que España dictara la
prohibición del amianto en todos los procesos productivos, los
efectos tóxicos del asbesto siguen muy vigentes, ante la gran
latencia de este material en el organismo humano. Los expertos
prevén alrededor de 40.000 muertes por la exposición a este mineral
en las próximas cuatro décadas, la misma cifra de víctimas
registradas hasta ahora.
La guía, que ha contado con la colaboración
del Col·lectiu Ronda y El Periódico, supone un manual muy práctico
para conocer qué es el amianto y su tipología, dónde se puede
encontrar alojado a día de hoy y cómo proceder a desmantelarlo de
manera segura, así como la sintomatología y los efectos sobre la
salud que acarrea el asbesto. Las principales patologías que se le
asocian son la asbestosis (o fibrosis pulmonar), el cáncer de pulmón
y el de laringe, y el mesotelioma maligno (tumor en la pleura o el
peritoneo).
Retos
En el acto de
presentación han intervenido, entre otros, el presidente y
vicepresidente de la AVAAC, Benedicto Martinoy José Luis Gómez, la
catedrática en Derecho de Trabajo y seguridad social de la UPF Julia
López, así como Marta Barrera, abogada del Col·lectiu Ronda.
Los participantes
en el acto han puesto de relevo las múltiples facetas en las que
conviene afrontar el desafío de una mala gestión en la manipulación
y el contacto con este mineral. Retos relacionados con vacíos
legales, equipamientos e infraestructuras que aún contienen amianto,
víctimas indirectas (vecinos del entorno de las fábricas y
familiares de trabajadores que lavaban su ropa o quedaban expuestos
al mineral en el hogar). La guía también estará disponible en breve
en la web de la AVAAC. Víctor Vargas Llamas
(elPeriodico.com) 12/04/2018 |
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Asociación de víctimas alerta
que el amianto causará 60.000 muertes en España
La Asociación de Víctimas Afectadas por el Amianto en Cataluña
(AVAAC) ha alertado hoy, en la presentación de una guía sobre esta
enfermedad, que el amianto causará más de 60.000 muertes en España
hasta el año 2040.
La "Guía informativa a toda la población
sobre los riesgos del amianto", que es gratuita, tiene por objetivo
ampliar los conocimientos de la población sobre este material que
"está prohibido en España desde 2002 y que causa unas más de 2.000
anuales en el Estado", ha informado el Colectivo Ronda, entidad que
ha participado en la edición de la guía con la AVAAC,
La
publicación contiene información sobre las características del
amianto, también llamado asbesto, las enfermedades que puede causar,
algunas de ellas incurables, los sectores profesionales y económicos
que lo han utilizado y el marco jurídico y legal que ampara a sus
víctimas y familiares.
En la presentación de la guía, que ha
tenido lugar en la Universidad Pompeu Fabra (UPF), el vicepresidente
de AVAAC, José Luis Gómez, ha advertido: "nos encontramos ante un
verdadero genocidio laboral y de un problema de salud pública que no
es cosa del pasado, sino que se mantiene hoy en día y perdurará
durante décadas".
En esta misma línea, la catedrática de
Derecho Laboral y de Seguridad Social de la UPF, ha espetado que "la
situación que se ha vivido en el Estado español en relación con el
amianto y la exposición de este material de miles de personas es un
verdadero crimen".
"El amianto es un ejemplo de cómo se ha
jugado con la salud de los trabajadores y de sus familias y de cómo
se ha ignorado la normativa en materia de prevención y de salud
laboral", ha añadido la catedrática.
La abogada del Colectivo
Ronda Marta Barrera ha recordado que la cooperativa inició la lucha
en defensa de las víctimas "en los años 70, cuando las empresas
actuaban con total impunidad" y que "no fue hasta el año 2008 que el
Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) y hasta el año 2012
que el Tribunal Supremo establecieron la responsabilidad de las
empresas".
Estas responsabilidades de "empresas como Uralita
o Rocalla que, debido a la manipulación del amianto, causaron
enfermedades y defunciones por incumplimiento de la normativa de
riesgos se hizo extensiva a sus familias", ya que era en casa de los
trabajadores "donde se lavaba la ropa" contaminada por el amianto,
ha dicho Barrera. EFE
(lavanguardia.com) 12/4/2018
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Uralita causa aún 15
cánceres mortales por amianto al año
Se
resiste a pagar a los vecinos que enfermaron por su planta de
Cerdanyola, cerrada en 1997
Un 25% de los nuevos afectados no
trabajaron en la fábrica ni convivieron con un empleado
En
2011, a Maite Martín le diagnosticaron un mesotelioma peritoneal, un
tipo de cáncer que suele acortar la vida a menos de un año y que
está causado por la exposición al amianto. «Cuando en el hospital me
dijeron que lo tenía por culpa de Uralita me quedé de piedra. Jamás
me lo hubiese imaginado», cuenta la mujer, vecina de Ripollet y
maestra durante 35 años en una escuela a un kilómetro de la fábrica
que la compañía dispuso en Cerdanyola del Vallès entre 1907 y 1997.
Según una reciente resolución judicial, la factoría emitió sin
control al exterior fibras de asbesto, causantes de cánceres de
pulmón y pleura y trastornos respiratorios crónicos.
Martín
es una afectada ambiental del amianto; es decir, contrajo la
afección por vivir y trabajar cerca de la factoría, de la que no fue
empleada ni convivió con uno de sus operarios. Es la única
superviviente de los 39 casos de Cerdanyola y Ripollet por los que
la Audiencia de Madrid instó en diciembre a Uralita (ahora
denominada Coemac) a indemnizar con más de dos millones de euros.
Como en otras sentencias, la firma se resiste a pagar y ha recurrido
al Tribunal Supremo. La novedad es que, por primera vez, un tribunal
ha reconocido como víctimas no solo a ex empleados y sus familiares,
sino también a vecinos que, como Maite, residieron alrededor de la
planta.
«De los 977 casos comprobados que han enfermado en el
Vallès Occidental por el amianto, un 17% es por vecindad con
Uralita», recuenta el doctor emérito Josep Tarrés, que estudia el
impacto del asbesto en la zona desde 1976. Aún ahora se registran de
40 a 50 diagnósticos nuevos al año atribuidos a la actividad de la
fábrica, dos décadas después de cerrar. Ocurre porque los síntomas
tardan cuatro décadas de promedio en manifestarse.
«Sin
Uralita, habríamos tenido 160 casos y estaríamos en la media
nacional, así que es responsable del 82% de los que se han probado»,
asegura el médico.En la actualidad, hay 400 pacientes en observación
por afecciones vinculadas al amianto en los municipios cuyo hospital
de referencia es el Parc Taulí de Sabadell. «Alrededor de uno de
cada cuatro casos nuevos son de vecinos que no tuvieron relación con
la empresa», estima Tarrés.
Se cuenta con que entre 2020 y
2023 se alcancen de 55 a 60 diagnósticos por año en Cerdanyola y su
entorno, y luego vayan descendiendo hasta 2040. Allí se detectan
unos 15 mesoteliomas al año. En un lustro, se prevén una veintena
anuales. «De 302 examinados, la media de esperanza de vida es de 11
meses desde que se detectan», precisa Tarrés, que reclama ayudas
para retirar el amianto instalado: «Temo una segunda oleada de
enfermedades porque se está degradando».
«Por estadística, no
tendría que estar viva», constata Martín; a base de quimioterapia y
dos operaciones, ha plantado cara al cáncer, en el que ha recaído
seis veces. «Como soy la única viva de los 39 de la denuncia, quiero
hablar por ellos y por mí. Cualquiera puede sufrir cáncer, pero a
nosotros nos han envenenado», distingue. Añade que «nadie sabía
nada» del riesgo de vivir cerca de Uralita, que producía placas de
fibrocemento que se expandieron como material de construcción. La
comercialización del mineral se prohibió en 2002 en España, más
tarde que en países europeos como Francia, Alemania u Holanda.
Trabajadores y esposas enfermos
«Uralita
tuvo interés en que no se supiera», sostiene Diego Ruiz, cuyos
progenitores murieron de cáncer. Su padre trabajó más de 20 años en
la factoría de Cerdanyola, donde el amianto dañó la salud de más de
500 empleados desde mediados de los 70. «Volvía de la fábrica con la
ropa manchada de blanco, como un pintor. Mi madre la sacudía»,
recuerda. Los hijos no pudieron acreditar que el tumor que su padre
no superó en 2008 fuera a consecuencia del asbesto, pero en cuanto a
la madre se certificó en «más de un 99%».
Como otras mujeres,
cayó enferma por limpiar el mono de trabajo de su esposo, tarea que
Uralita no asumió hasta 1977. «Le encontraron cáncer de pleura en
octubre de 2012 y la enterramos en enero de 2013. Fue rápido y
doloroso», atestigua Diego. «Desgraciadamente, vemos a menudo
mesoteliomas que desarrollan señoras de 50 a 55 años, que son las
hijas mayores de trabajadores que ayudaban a su madre a limpiar la
ropa del padre», dice Tarrés.
Esther Costa es abogada del
Col·lectiu Ronda, que representa a los afectados. «Se ha abierto un
camino para los pacientes ambientales. Hasta ahora, era un pleito
arriesgado», afirma. A la vez que aguardan sentencia para otra causa
de denunciantes de Cerdanyola y Ripollet, que piden 5,1 millones de
compensación, estudian nuevas demandas por más casos en ambas
localidades, así como en Castelldefels, Getafe y Aranjuez. No es un
proceso sencillo: aparte de aportar informes que vinculen la
afección con el amianto y presuntas negligencias de las empresas,
los afectados deben acudir al juzgado antes de que transcurra un año
desde que recibieron el diagnóstico.
«No nos mueve que nos
puedan indemnizar, sino la indignación de ver que nos han hecho daño
y puedan irse de rositas», señala Ruiz. Uralita -con 8,6 millones de
beneficios en 2017- recurre «sistemáticamente», como Costa sabe
bien: «Es una estrategia con un alto coste y perjudica a las
familias porque, cuando las indemnizan, normalmente el afectado ya
ha fallecido».
«El dinero no compensa la calidad de vida que
hemos perdido. Lo que buscamos es justicia», remarca Maite, que pide
al Supremo que no admita el recurso de la compañía: «Si lo acepta a
trámite, ¿estaré viva cuando resuelva?». JORDI RIBALAYGUE
(elmundo.es) 2/4/18 |
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Un total
de 5.830 personas mueren por el amianto entre 2000 y 2016
UGT exige la
creación inmediata del Fondo de Compensación para las Víctimas de
Amianto, y denuncia que en España ha muerto 5.830 personas por el
agente cancerígeno entre 2000 y 2016, a pesar de estar prohibido su
utilización.
El Fondo de compensación que aún no se ha
puesto en marcha, que se aprobó en el Congreso de los Diputados el
pasado mes de octubre.
En nuestro país,
el amianto se prohibió hace ya más de una década, aun así sigue
estando presente en la vida de muchos trabajadores/as, como aquellos
que se ocupan de las tareas de reparación, retirada de materiales
contaminados, transporte a vertederos, tratamiento de residuos,
mantenimiento de canalizaciones de agua, rehabilitación y
mantenimiento de edificios (albañiles, fontaneros, electricistas) y
también aquellos que ocupen edificios construidos con amianto o en
los que existan instalaciones con amianto y que quizá lo desconocen.
Según la,
actualmente fallecen en el mundo más de 100.000 personas por su
exposición al amianto y, según la OMS, en la UE se registran entre
20.000 y 30.000 nuevos casos relacionados con el amianto anualmente
UGT reclama la
implantación de este fondo, como ya tienen países como Francia,
Holanda o Bélgica, y la puesta en marcha de un Plan de Acción
Estatal para erradicar todas las fuentes de amianto existentes.
Según la Organización Internacional del
Trabajo (OIT), anualmente fallecen en el mundo más de 100.000
personas por su exposición al amianto. Según la Organización Mundial
de la Salud, sólo en la UE, se registran entre 20.000 y 30.000
nuevos casos de enfermedades relacionadas con el amianto anualmente
y más de 300.000 personas morirán de mesotelioma pleural -tumor
canceroso poco común. Afecta principalmente el revestimiento del
pulmón y de la cavidad torácica (pleura) o el revestimiento del
abdomen (peritoneo). Se debe a la exposición prolongada al amianto
(asbestos).- hasta 2030.
Es intolerable que
en España, 5.830 personas fallecieran por mesotelioma del año 2000
al 2016, según los datos del registro de mortalidad del Instituto
Nacional de Estadística (INE), 4.376 eran hombres y 1.454 mujeres.
En el año 2016, 4.085 empresas estaban inscritas en el Registro de
Empresas con Riesgo de Amianto (RERA) según el informe del Grupo de
Amianto de la CNSST “Planes de Trabajo en las diferentes Comunidades
Autónomas. De 2009 a 2015”.
UGT denuncia, con
estas cifras en la mano, que únicamente se han declarado 34
enfermedades profesionales provocadas por amianto de las 21.188
registradas durante 2017, lo que deja entrever la clara
infradeclaración de las mismas –una muy baja declaración de
enfermedades causadas por el agente cancerígeno-.
Para el sindicato,
este Fondo de Compensación ayudaría a que las víctimas del amianto y
sus familias no tengan que luchar en los juzgados para reclamar sus
derechos, con el coste económico importante que esto supone y, por
supuesto, el alto coste personal. Se trata, de reparar esta
injusticia social y crear un fondo de compensación como el que ya
existe en otros países como Francia, Holanda o Bélgica.
Por ello UGT exige
al Gobierno y a los grupos parlamentarios de nuestro país que
agilicen los trámites y avancen en la creación de este fondo, que no
se quede en el olvido ya que los trabajadores y trabajadoras
afectados por el amianto, así como sus familias, necesitan
urgentemente que se haga justicia y les sean reparados los graves
daños sufridos.
El sindicato
manifiesta la necesidad de poner en marcha un Plan de Acción Estatal
para erradicar todas las fuentes de amianto existentes, para así
cumplir con el objetivo de erradicación del amianto instalado en
suelo europeo para el año 2032, establecido en el dictamen de fecha
20-02-2015 CCMI/130 del Comité Económico y Social Europeo (CESE).
(http://diario16.com/total-5-830-personas-murieron-amianto-2000-2016/)
14/1
Los ex trabajadores de
Uralita afectados por amianto cobrarán esta semana 843.750 euros en
indemni-zaciones
Un
grupo de ex trabajadores de la antigua fábrica de Uralita de Dos
Hermanas, correspondientes al segundo juicio colectivo celebrado
hace cuatro años, espera recibir esta semana el cobro de 843.750
euros, correspondiente a las indemnizaciones que estableció el
Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), que ha confirmado
la sentencia del Juzgado de lo Social número 8 de Sevilla.
Fuentes de la Asociación de Víctimas del Amianto de Andalucía
(Avida) han valorado a Europa Press que "por fin los antiguos
trabajadores y familiares de algunos que ya no se encuentran entre
nosotros, ven concluido el largo proceso que iniciaron".
Han
explicado que los que constituyeron la segunda demanda colectiva en
Andalucía de afectados por la exposición al amianto durante su
relación laboral con la empresa Uralita "han recibido o recibirán en
esta semana, el cobro de los importes que en su día estableció a su
favor el TSJA".
Las indemnizaciones, correspondientes al
segundo juicio colectivo, celebrado en el juzgado de lo Social
número 8 de Sevilla, varían de cuantía, en función de la gravedad de
las dolencias que indemnizan, oscilando entre los aproximadamente
12.800 euros las de menor cuantía y los 220.000 euros la de mayor
importe, siendo el total de 843.750 euros.
Para la Asociación
Avida y para todos estos trabajadores ello es motivo de "alegría y
satisfacción", si bien reconocen que "aquellos que percibirán los
importes en lugar de su esposo o padre, no deja de ser una sensación
agridulce, puesto que no hay manera de reemplazar el vacío de un ser
querido, o el sufrimiento que ellos padecieran a consecuencia de las
enfermedades relacionadas con el amianto".
Tanto la
asociación Avida como sus representantes legales han afirmado que no
se olvidan "de la losa de la prescripción que, persiste, sobre parte
de los demandantes que en su día iniciaron este proceso". Por lo
demás, continúan esperando el resultado del primer juicio colectivo
que sigue encontrándose pendiente de lo que resuelva el Tribunal
Supremo. EL JUICIO
En abril de 2014, el Juzgado de lo Social
número 8 de Sevilla condenaba a la empresa Uralita a pagar 1,3
millones de euros a 14 extrabajadores de la antigua fábrica de Dos
Hermanas (Sevilla) que resultaron afectados por el amianto, según la
sentencia del segundo juicio colectivo, que afectaba a 30
extrabajadores, donde se considera que los otros 16 casos habían
prescrito y no se les reconocía indemnización.
Según la
sentencia, consultada por Europa Press, las reclamaciones de
cantidad que efectuaron este grupo de 30 extrabajadores se ha
estimado parcialmente, cabiendo la posibilidad de recurso ante el
Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA). En ese sentido,
este colectivo de extrabajadores presentaron recurso ante el TSJA
contra dicha sentencia del Juzgado de lo Social número 8 de Sevilla
que condenaba a la empresa a pagar 1,3 millones de euros a 14
extrabajadores pero que dejaba fuera a otros 16 por considerar que
sus casos han prescrito y no se les reconoce indemnización.
Este juicio contra la empresa Uralita se celebraba el 17 de febrero
de 2014 y en el mismos afectados reclamaban 4,2 millones de euros de
indemnización por los daños causados que provocan enfermedades y en
algunos casos fallecimientos, toda vez que de los 30 demandantes de
esta segunda tanda, seis ya habían fallecido.
(diariodesevilla.es) 31/1
Las enfermedades relacionas con
el amianto pueden tardar 40 años en manifestarse
Un estudio
realizado por un equipo de investigadores, financiado por los
institutos Universitario de Atención Primaria (IDIAP) Jordi Gol de
Barcelona y el Catalán de la Salud (ICS), y por el Ministerio de
Sanidad, ha reflejado que las enfermedades relacionadas con el
amianto pueden tardar hasta 40 años en manifestarse.
logo_jordigolEsta investigación se efectuó en la zona del Vallés
Occidental, donde viven cerca de 500.000 personas, y analiza el
conjunto de enfermedades que sufrió esta población por inhalación de
amianto entre los años 1970 y 2006.
Según los datos
registrados por el citado trabajo, 544 personas fueron
diagnosticadas con alguna enfermedad relacionada con el amianto, ya
sea una patología benigna o maligna. Tres de cada cuatro personas
analizadas eran hombres, de una edad que oscila en torno a los 60
años. Cerca del 40 por ciento de los pacientes sufría más de una
patología vinculada con el amianto y una de cada cuatro personas
afectadas sufría una enfermedad maligna.
Por otro lado,
la mencionada investigación destaca que la fuente de exposición
principal es la laboral y que se alarga más de 20 años, en un 70 por
ciento; seguida de la exposición medioambiental, con un 15 por
ciento; y que el amianto tarda unos 40 años de media a provocar
problemas de salud.
Efecto sobre la
salud En
este contexto, los investigadores defienden que el estudio supone
“un avance original” porque “permite conocer el alcance de la
afectación del amianto en el conjunto de la población civil”; por
saber “el efecto sobre la salud cuando se acumulan enfermedades
benignas causadas por el amianto”; y por posibilitar “avanzar el
momento del diagnóstico de una patología relacionada con el
amianto”.
El IDIAP Jordi
Gol indica que hay hasta 125 millones de trabajadores que siguen en
contacto directo con el amianto. Los científicos de esta
investigación apuntan que “la ausencia de una política de salud
dirigida al amianto imposibilita erradicar la muerte por inhalación
de este material; se demuestra el efecto devastador que tiene sobre
la comunidad una exposición prolongada al amianto; y que en Cataluña
hace falta una aproximación clínica para iniciar lo antes posible
las tareas preventivas de salud”.
(actasanitaria.com) 8/1/2018
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Nuevas sentencias reconocen la
asbestosis en mujeres por lavar ropa de trabajo de sus maridos
(28/8) Los fallos son de Madrid, pero abren
una vía para los afectados
La Asociación
Gallega de Víctimas do Amianto (Agavida) se alegra de las últimas
sentencias que reconocen que la asbestosis que sufrieron varias
mujeres se generó cuando lavaban la ropa de sus maridos, que
trabajaban en la plata de Uralita en Getafe. «Por supuesto que aquí
en Ferrol se han dado casos. De hecho, hay médicos muy
concienciados, como Carlos Piñeiro, que los han detectado», explica
Ramón Tojeiro, presidente de la citada entidad de enfermos.Los
fallos redactados en Madrid también abren una vía para los vecinos
que residían cerca de la factoría de Uralita y que sufrieron daños,
algo que en el entorno de los astilleros es menos probable, según
destaca Tojeiro. Un fondo en vías de creaciónEn cualquier caso,
Agavida se centra en continuar con la iniciativa para crear un fondo
de compensación para todos los afectados y en el que se puedan
amparar tanto las mujeres que enfermaron tras manipular ropa de
trabajo, como los empleados de empresas que ya no existen, como
Bazán o Astano, y no tienen forma de llegar
a compensaciones. Tojeiro recuerda a tantas familias que se
expusieron al asbesto cuando se lavaba la ropa en el pilón de los
hogares. Asegura que se dio un importante paso el pasado marzo
cuando se presentó esta petición en el Congreso. En mayo el Gobierno
le dio entrada y durante el mes de septiembre esperan que se lleve
al pleno del Congreso. «Cuando se aceptó en el mes de mayo estuvimos
con todos los grupos y la respaldaban. Tras el parón de las
vacaciones esperamos tener noticias positivas en septiembre»,
precisa Tojeiro.
Casi toda Europa cuenta ya con fondo de compensación para las
víctimas del amianto. Las asociaciones pretenden que se siga el
modelo francés, ya que entienden que es el más adecuado, en el que
están incluidos el Gobierno, las empresas y las víctimas.Agavida
calcula que en Ferrol hay 11.000 casos esperando una
indemnizaciónBuena parte de estos enfermos deben recurrir a largas
batallas judiciales
La asociación de afectados por el amianto
calculan que el nuevo fondo de compensación sería un solución para
cerca de 11.000 personas. Buena parte de estos enfermos deben
recurrir a largas batallas judiciales: «Las empresas recurren una y
otra vez, así que sucede en muchas ocasiones que el afectado fallece
antes de cobrar su indemnización», lamenta Tojeiro.
El nuevo fondo evitaría evitará tener que
acudir a los juzgados para reclamar por los daños derivados de
trabajar en contacto con el amianto, ya que sería casi un proceso
administrativo.Consulta en el MarcideCarmen Diego es la neumóloga
que está al frente de la consulta monográfica de asbestosis del
Complejo Hospitalario Universitario de Ferrol. De hecho, la
contrataron para llevar este servicio en el que hay disponible un
protocolo para cualquier trabajador del naval. Diego reconoce que
muchos no acuden por miedo al diagnóstico y, aún así, se acercan a
los 8.000 los que han pasado por sus análisis y estudios. Algunos
pertenecen a mujeres que no trabajaban en el astillero, pero estaban
en contacto con la ropa. Sobre estos casos los médicos aseguran que
estos pacientes estaban menos expuestos, pero de forma continuada.
https://www.lavozdegalicia.es/noticia/ferrol/ferrol/2017/08/28/nuevas-sentencias-reconocen-asbestosis-mujeres-lavar-ropa-trabajo-maridos/0003_201708F28C3991.htm
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“Sin
un fondo para víctimas del amianto muchas empresas lo van a pasar
mal” Jesús Uzkudun, una de las voces más
autorizadas en la lucha contra el amianto, pide apoyo empresarial
para que el Congreso active en otoño un fondo para indemnizaciones
Jesús Uzkudun, portavoz de Asivamie y experto en Amianto.
DONOSTIA - El portavoz de la asociación de víctimas del amianto
Asviamie, ya jubilado, continúa la pelea que inició como responsable
de salud laboral de CCOO-Euskadi. Y es que las cifras de afectados
por el amianto van a seguir aumentando en los próximos años,
advierte el hernaniarra Jesús Uzkudun, que reclama más implicación
de toda la sociedad.
Asviamie registró 29 fallecimientos a
causa del amianto el año pasado. ¿Están aumentando los casos?
-Son los casos que contamos nosotros pero hay muchos más. Es
verdad que el hecho de que tengamos éxito en el reconocimiento y en
la compensación del daño a la gente le anima a venir a la
asociación. Pero las cifras reales son mucho más altas. No tenemos
registrados ni al 20% o como mucho el 30% de los casos existentes.
Hablaríamos entonces de unos cien fallecidos al año por amianto.
-Hay datos de Osalan que indican que hay más de cien
fallecimientos. Hace poco, un estudio del Ayuntamiento de Donostia
sacó a la luz, en el vertedero de Altza, un montón de casos de
mesiotelioma de los que nosotros no teníamos conocimiento. Hay casos
en los que Osakidetza no comunica sospecha y que si la gente no
recurre pues quedan ocultos.
Teniendo en cuenta que desde la
exposición se tarda unos 25 o 30 años en desarrollar la enfermedad,
¿estamos ahora en el pico de incidencia o lo peor está aún por
venir?
-No hemos visto lo peor. En los próximos diez años van
a seguir aumentando los casos. En 2008 en Alemania se reconocieron
1.769 cánceres profesionales por amianto y en Francia 1.625. En
España solo 62. Está claro que no tenemos condiciones de trabajo
mejores que en Alemania.
¿Se está ocultando la magnitud del
problema?
-Uno por otro, la casa sin barrer. Hay médicos que
dicen a la familia que inicien los trámites para reclamar porque la
enfermedad es por el amianto, pero no todos. Y eso que por ley todos
los médicos de Osakidetza están obligados a comunicar sospecha, con
lo que se activa automáticamente el protocolo de enfermedad
profesional. A veces lo hacen solo con el mesotelioma, cuando hay
tantos casos o más de cáncer de pulmón. Echan muy rápido la culpa al
tabaco. Luego, en la prensa salen las sentencias donde se pilla a
una empresa y se le saca la indemnización, pero hay enfermos que han
estado en pequeñas empresas que no pueden reclamar a nadie.
¿Queda amianto en las empresas vascas?
-Sí. En el
Ayuntamiento y las escuelas de Llodio, por ejemplo, que lo están
quitando ahora. Aquí en Hernani, en una empresa que repara motores
eléctricos el delegado denunció porque el amianto estaba dispersado
por el taller y lo intentaron despedir. Hay mucho amianto, es así.
Se habla de las uralitas, pero hay amianto instalado en zonas
aislantes, en tuberías... El riesgo está ahí. Por eso pedimos que se
haga un inventario de amianto y que se contemple esto en serio en la
prevención. El Consejo Económico y Social (CES) europeo ha planteado
la necesidad de erradicar todo el amianto para 2032 y no se están
tomando medidas.
¿De quién es la responsabilidad?
-De
todos. En una obra de Lasarte, por ejemplo, machacaron un tejado de
uralita y lo dejaron junto al resto de residuos. Eso sucede. Ahí
deben actuar Osalan y la Inspección, porque hay trabajadores
expuestos, y también Medio Ambiente, que no pone interés en esto.
Luego está la ciudadanía y los sindicatos, que ven eso y no
denuncian. Hay tarea para todos, creo que los sindicatos deberían
implicarse un poco más.
¿Falta sensibilizar a la sociedad del
riesgo del amianto?
-Bueno, vamos dando pasos. Durante años
me han llamado chalado y ahora se empieza a ver que esto es grave.
Pero falta sensibilización sí. Como los residuos de amianto que han
aparecido en Altza hay mil casos, porque las empresas han estado
vertiendo amianto en cualquier esquina.
Existe un listado de
personas que han trabajado con amianto. ¿Es suficiente la vigilancia
que hace Osakidetza con ellas? (31/7
http://www.noticiasdegipuzkoa.com/2017/07/31/economia/sin-un-fondo-para-victimas-del-amianto-muchas-empresas-lo-van-a-pasar-mal
Cerca de 300 personas mueren
al año en España a causa de un cáncer por amianto
El cribado de cáncer de pulmón en personas expuestas al asbesto,
un carginógeno reconocido por la OMS y prohibido en España desde
2002, mejoraría la detección precoz.
Asbesto o amianto es el
término utilizado para nombrar un conjunto de silicatos minerales
que suelen romperse en fibras. Su uso ha comportado la aparición de
numerosas enfermedades, especialmente pleuropulmonares,
caracterizadas por una prolongada latencia. El material es, además,
un carcinógeno reconocido por la OMS desde 1987 y en España está
prohibido desde 2002. “La publicación de la tercera edición del
protocolo de vigilancia sanitaria específica del amianto, junto con
la aparición de nuevas técnicas diagnósticos, nos motivó a promover
la elaboración de una normativa que revisase aspectos clínicos,
radiológicos y funcionales de las diferentes enfermedades
relacionadas con el mismo. Y también que estableciese
recomendaciones para el diagnóstico y el seguimiento de los
pacientes expuestos”, explica Carmen Diego Roza, neumóloga y miembro
del Área de Enfermedades Respiratorias de Origen Ocupacional de la
Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR).
El resultado de dicha revisión acaba de publicarse bajo el título
Recomendaciones sobre el diagnóstico y el manejo de la patología
pleural y pulmonar por asbesto, con el número 72 de la colección
Normativas SEPAR. El trabajo se ha presentado en el 50º Congreso
SEPAR. La normativa hace una llamada a considerar el cribado de
cáncer de pulmón entre los trabajadores expuestos al amianto, por lo
que se requiere un estudio amplio y aleatorizado que permita
establecer unas recomendaciones consistentes basadas en evidencia
científica de alta calidad. El cribado de cáncer de pulmón en
trabajadores expuestos al asbesto podría ser efectivo para detectar
cáncer de pulmón asintomático, en estados precoces, con lo que se
podría reducir su mortalidad.
El desarrollo de enfermedad
pulmonar tras exposición al asbesto depende de la intensidad de la
exposición y del tamaño y características de las fibras que lo
componen. Una vez en los alveolos, las fibras interactúan con
células del sistema inmunitario y alteran su función. La interacción
con las células natural killer altera su función citotóxica y
permite que las células tumorales puedan escapar al control del
sistema inmunitario. “Otros autores han detectado además”, explica
la doctora, “la capacidad de las fibras de asbesto para producir un
daño directo en el ADN de las células inmunocompetentes relacionadas
con la defensa antitumoral.
El amianto pues, está asociado a
la aparición de enfermedades malignas. La exposición a asbesto
constituye un factor de riesgo bien establecido para desarrollar
cáncer de pulmón. En un reciente estudio en trabajadores de
aislamientos, el asbesto aumentó el riesgo de cáncer de pulmón. La
coincidencia de tabaquismo y exposición a asbesto supuso un riesgo
aditivo, y si además existía asbestosis, el efecto fue supraaditivo.
La mayoría de los estudios se centran, así, en dos hipótesis: una
considera el efecto de la combinación de exposición a asbesto
aditivo al tabaquismo, y la otra, multiplicativo.
La
incidencia del mesotelioma pleural, otro tumor maligno, aumenta con
una mayor exposición al amianto. Solo en cinco años, los que
transcurrieron entre 2007 y 2011, el ministerio de Sanidad registró
en España 1.297 muertes producidas por mesotelioma pleural, causado
en el 98% de los casos por la exposición al asbesto. Todas las
fibras de asbesto se han asociado a este tumor que se caracteriza
por un tiempo de latencia muy prolongado, de más de 20 años, pero
que puede llegar a ser de más de 50.
En España, la
mortalidad por mesotelioma pleural ha aumentado hasta la década
actual, y se prevé que sigan produciéndose muertes por contacto
laboral al menos hasta 2040. La publicación científica OMC Cáncer
pronostica que entre 2016 y 2020 fallecerán en España 1.319 personas
por mesoteliomas pleurales, a un ritmo de 264 personas al año. La
exposición al amianto también se ha relacionado con un mayor riesgo
de aparición de tumores malignos en otras localizaciones como
laringe , ovario, faringe, esófago, estómago, colon y recto.
Se conocen más de 3.000 aplicaciones diferentes del asbesto en
múltiples sectores industriales: construcción, automoción,
aeronáutica, naval, farmacéutico, textil, ferroviario, nuclear, etc.
Incluso aparece en productos de amplio consumo, como juguetes,
tostadoras, secadores o artículos de fumador. Esta disparidad de
presentaciones dificulta a menudo su identificación como un material
usado por el trabajador cuando se recoge su historia laboral. En la
actualidad, después de su prohibición, el riesgo de exposición
laboral a asbesto persiste para los trabajadores implicados en
labores de demolición, mantenimiento, reparación y transporte de
estructuras que contengan asbesto previamente instalado. Un estudio
publicado en la revista Industrial Health constata que las arcas
públicas españolas sufragaron entre 2004 y 2011, 464 millones de
euros para tratar tumores relacionados con el amianto.
“La
legislación española indica que cuando una enfermedad es
consecuencia de la exposición laboral al amianto”, recuerda Diego,
“debe ser notificada obligatoriamente como sospecha de enfermedad
profesional por parte de cualquier médico del Sistema Nacional de
Salud”. También establece que las empresas deben facilitar
información, lo que ha dado lugar al establecimiento, en cada
comunidad autónoma, de listados de las empresas en las que se ha
empleado amianto. En este marco, las comunidades autónomas han
establecido sus programas de prevención laboral y asistencia a la
población expuesta.
La atribución de una enfermedad al
asbesto tiene un significado diagnóstico que influye en su control
posterior y que además puede tener efectos legales y económicos, ya
que el mesotelioma, la asbestosis, el cáncer de pulmón, el cáncer de
laringe y la fibrosis pleural acompañada de restricción ventilatoria
son reconocidos como enfermedades profesionales, y en muchos casos
otorgan el derecho a recibir una indemnización.
http://consalud.es/pacientes/cerca-de-300-personas-mueren-al-ano-en-espana-a-causa-de-un-cancer-por-amianto-37837
Fallece de cáncer a los 58
años por los abrazos que dio a su padre cuando era una niña
Una mujer británica ha fallecido de un cáncer que podría haber
sido provocado por los abrazos que dio durante su infancia a su
padre, un instalador de tuberías que jugaba con ella cuando
regresaba a casa vestido con su uniforme de trabajo, que había
estado expuesto al amianto, según inform{o el portal de
Derbytelegraph.co.uk
Susan MacGregor fue diagnosticada en
septiembre de 2015 de un mesotelioma, un tipo de cáncer que afecta
al revestimiento de los pulmones y que está vinculado con la
exposición a este mineral. 14 meses después falleció a los 58 años
de edad. Tenía tres hijos.
"Los niños están totalmente
desolados, han perdido a su madre, han perdido a una amiga, los
nietos han perdido a su abuela y yo he perdido a mi mujer", ha
declarado Dave MacGregor, marido de la fallecida, al diario 'Derby
Telegraph'.
Susan, a quien le gustaba caminar, sintió que
algo no iba bien cuando un día, después de hacer ejercicio, vio que
apenas podía respirar. Fue trasladada al hospital, donde las pruebas
médicas determinaron que tenía este tipo de cáncer, mortal en casi
el 70% de los casos que se detectan anualmente.
Su familia no
tiene derecho a una indemnización
La mujer comenzó entonces
un duro tratamiento de quimioterapia y se sometió a una operación
para quitarle una parte del tejido afectado de su pecho. Pero el
tratamiento no dio los resultados que el matrimonio esperaba.
La investigación realizada por un forense determinó que la causa
más probable de su fallecimiento era el amianto al que probablemente
se expuso a través del mono de trabajo de su padre. "Solo se
necesita que una pequeña partícula se instale en el lugar adecuado,
y 40 o 50 años después te diagnostican esta terrible enfermedad",
explicó Dave.
Ahora, su marido está indignado con el Gobierno
por permitir que el amianto se utilice en la construcción de
edificios. Sin embargo, su familia no puede recibir una
indemnización, ya que los abogados han sido incapaces de vincular
que la pasada exposición al amianto de Susan se debió al oficio
concreto de su padre. "El dinero no puede devolverme a mi mujer",
añade el marido de la fallecida. (9 julio2017)
http://www.ecuavisa.com/articulo/noticias/internacionales/295431-fallece-cancer-58-anos-abrazos-que-dio-su-padre-cuando-era
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Cerdanyola del Vallès detecta un
enfermo por amianto a la semana La ciudad
ya tiene el récord de ser el municipio de España con mayor
prevalencia de cáncer de pleura a causa de este carcinógeno.
JESSICA MOUZO QUINTÁNS 30/9/2016
Los fantasmas
del amianto cercan Cerdanyola del Vallès, el municipio barcelonés
que albergó la fábrica más grande de Uralita, una empresa que
empleaba el mineral cancerígeno para producir fibrocemento. Las
fibras que desprende el mineral se incrustan en los pulmones y
provocan graves dolencias respiratorias y cáncer de pleura y pulmón.
La fábrica echó el cierre en 1997 y España prohibió el uso de este
material en 2002,
pero las consecuencias de la exposición al amianto despiertan
ahora tras 40 años de letargo. Los médicos de la zona detectan más
de medio centenar de enfermos por exposición al amianto al año y la
ciudad ya tiene el triste récord de ser el municipio de España con
mayor prevalencia de cáncer de pleura a causa de este carcinógeno.
Desde su centro de operaciones, un despacho en el centro de
atención primaria (CAP) Fontetes de Cerdanyola, el doctor Josep
Tarrés investiga y monitoriza a todos los enfermos por amianto de la
ciudad. Junto a un grupo de trabajo formado por otra decena de
facultativos, el neumólogo ha detectado más de un millar de
pacientes afectados por alguna de las dolencias derivadas del
amianto.
Y sigue sumando: cada semana aparece, de media, un caso nuevo.
“Puede provocar desde patologías crónicas en la pleura, como las
placas o los derrames pleurales, hasta tumores de pulmón”, apunta
Tarrés. La asbestosis (el pulmón se aprisiona y el paciente sufre
continuas insuficiencias respiratorias) es otra de las dolencias más
comunes, aunque la verdadera sentencia de muerte es el mesotelioma,
un cáncer de pleura que solo se produce por exposición al mineral y
reduce la esperanza de vida a menos de un año desde el diagnóstico.
En el caso de la asbestosis, aunque se cronifica, a largo plazo el
paciente puede precisar de un trasplante e incluso puede causar la
muerte por una insuficiencia respiratoria grave.
Latencia de 20 años
El amianto fue empleado durante buena parte del siglo XX para
montar tejados y cubrir tuberías y canalones. Estaba considerado uno
de los materiales milagrosos porque era barato, incombustible,
aislante de calor y del sonido y resistente a la corrosión química y
a las torsiones. Pero desde los años 40 se sabía que también era
peligroso y en 1977 fue declarado cancerígeno por la Organización
Mundial de la Salud (OMS), aunque todavía se emplea en muchos países
del mundo.
Su largo periodo de latencia —los síntomas tardan
entre 20 y 40 años en manifestarse— ha retrasado hasta ahora las
consecuencias de su exposición. Los expertos calculan que el 100% de
los mesoteliomas y entre el 8% y el 15% de los tumores de pulmón
están vinculados al amianto, pero advierten de que el pico de
enfermos está por llegar. Según la Unión Europea, de aquí a 2030,
medio millón de personas morirán en Europa de cáncer por la
exposición al amianto.
Según el Departamento de Salud, los
ingresos hospitalarios por asbestosis se han disparado un 83% en 10
años (en 2015 se registraron 361 hospitalizaciones de 245
pacientes). Para Tarrés, no obstante, cualquier cifra de afectados
se queda corta. El infradiagnóstico es “brutal”. “Hemos rescatado
muchas historias clínicas de fallecidos que, al ver de nuevo su
caso, te das cuenta de que era una enfermedad por amianto”, apunta
el neumólogo.
Víctimas
pasivas
El problema, asegura el médico, es
que no se trata de enfermedades laborales exclusivamente. Hay
víctimas pasivas: también los familiares de los empleados de las
fábricas o sus vecinos han estado expuestos al amianto. Así,
mientras la asbestosis es más común en antiguos trabajadores de la
fábrica porque requiere una exposición prolongada al mineral, el
mesotelioma precisa de mucha menos dosis inhalada, aunque tarda más
en manifestarse. “De los 194 mesoteliomas que teníamos en diciembre
de 2015, el 43% no eran laborales. Muchas mujeres de los empleados
de la fábrica aspiraban las fibras de amianto al lavar la ropa de
trabajo de sus maridos, por ejemplo”, apunta Tarrès. También la
exposición por vecindad propició más diagnósticos de mesoteliomas
ajenos a los trabajadores de la fábrica de fibrocemento.
Según los datos de los que disponía hace dos años (811 diagnósticos
en septiembre de 2014), el 66% de los casos eran de origen laboral.
El resto se distribuía entre familiares de trabajadores (13,3%),
vecindad (19,4%) y, en menor medida, por exposición ambiental. El
infraregistro, no obstante, frustra a los expertos. “Nunca podremos
saber cuánta gente afectada hubo realmente”, lamenta el médico.
Tras más de una década investigando la situación del amianto en
Cerdanyola, Tarrés también ha mapeado la ubicación de los enfermos
detectados. Aunque lo esperable era que la distribución fuese más o
menos uniforme en torno a la fábrica, los estudios del neumólogo
constataron que, debido a un fenómeno meteorológico (un viento suave
del noroeste), el grueso de los diagnósticos se concentra al sureste
de donde se ubicaba la fábrica de Uralita.
Tarrés reivindica
la necesidad de “hacer un censo, como en Inglaterra o en Italia, del
amianto que hay en la ciudad” y desambientar la zona en condiciones.
“Hay mucha pasividad en este tema”, lamenta el neumólogo.
LAS CONSECUENCIAS DEL AMIANTO
Latencia Las consecuencias de inhalar las fibras cancerígenas
del amianto pueden tardar en manifestarse entre 20 y 40 años.
Tumores La exposición a este mineral causa el 100% de los
mesoteliomas y entre el 8% y el 15% de los tumores de pulmón.
Asbestosis Los ingresos hospitalarios por esta fibrosis pulmonar
se han disparado un 83% en 10 años (361 en 2015).
http://ccaa.elpais.com/ccaa/2016/09/30/catalunya/1475262515_667530.html
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Uralita indemniza con casi 140.000
euros a una familia tras la condena por cáncer de amianto
La autopsia reveló que la causa de la muerte del trabajador
de Uralita fue un mesotelioma sarcomatoide difuso, enfermedad
producida por la inhalación de fibras de amianto.
Uralita se ha visto pagar una indemnización de 135.612 euros a una
mujer viuda y a sus cinco hijos por la enfermedad que sufrió su
marido cuando trabajaba en las instalaciones que la firma fabricante
de fibrocemento tenía en Valladolid.
El abono, según El Norte
de Castilla, se produce a raíz de la sentencia firme del Tribunal
Superior de Justicia de Castilla y León dictada en enero, que fijaba
en 87.182 euros para su viuda y otros 9.686 euros para cada uno de
los cinco hijos, más los intereses legales, la cantidad a pagar por
Uralita Productos y Servicios (anteriormente Fibrocementos).
El marido y padre de los demandantes, trabajó en la fábrica de la
compañía Uralita en Valladolid desde febrero de 1974 hasta el 7 de
mayo de 1992 El fallo considera probado que Cándido B. M. trabajó
en la fábrica desde febrero de 1974 hasta el 7 de mayo de 1992. Se
dedicaba a descargar camiones de amianto "sin que conste se
realizaran mediciones adecuadas de dicha sustancia contaminante y
sin que existiera ningún tipo de medidas de protección colectiva ni
individual".
El 19 de septiembre del 2010 el trabajador
falleció con 79 años y la autopsia determinó que la causa de la
muerte fue un mesotelioma sarcomatoide difuso, una enfermedad
producida por la inhalación de fibras de amianto. Está
científicamente probado que la inhalación de estas partículas de
forma periódica provoca enfermedades respiratorias que terminan
derivando en cáncer de pulmón.
La Seguridad Social declaró
el carácter de enfermedad profesional en marzo de 2011, por lo que
se le reconoció a su esposa una pensión de viudedad. En 2013, el
Juzgado de lo Social 1 de Valladolid impuso mediante una sentencia a
la empresa un recargo del 50% de las prestaciones reconocidas,
porque Uralita no contaba con medidas de seguridad e higiene durante
los 18 años que el trabajador permaneció en ella.
(2-8-2016)
http://vozpopuli.com/economia-y-finanzas/87299-uralita-indemniza-con-casi-140-000-euros-a-una-familia-tras-la-condena-por-cancer-de-amianto
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Catorce víctimas pasivas del
amianto reclaman 5,1 millones de euros a Uralita
El pasado diciembre un juzgado madrileño consideró probado que
fue la ropa contaminada de amianto el origen del cáncer y otras
patologías que sufren las víctimas
Antigua
fábrica de Uralita de Cerdanyola ANTONIO
MORENO
Catorce vecinos de Cerdanyola y Ripollet
(Barcelona) que desarrollaron un cáncer supuestamente por inhalar el
amianto que impregnaba la ropa de familiares suyos empleados de
Uralita reclaman indemnizaciones de 5,1 millones de euros a la
empresa, en una demanda que presentarán el próximo lunes.Según ha
informado el Colectivo Ronda, bufete de abogados que representa a
los demandantes ante los tribunales, la demanda invocará la
jurisprudencia existente que responsabiliza a Uralita de las
enfermedades sufridas por los familiares de los extrabajadores de la
fabricante de amianto.Los demandantes son las llamadas víctimas
pasivas de amianto, en su mayoría mujeres de empleados de Uralita
que entraron en contacto con la sustancia tóxica al lavar en casa la
ropa de trabajo de sus maridos pese a que, según el Colectivo Ronda,
la normativa obligaba a la empresa a asumir la limpieza de esas
prendas.Con el paso del tiempo, las mujeres desarrollaron
mesotelioma, una forma de cáncer del pulmón que, según sostiene la
demanda, tiene como único origen posible la exposición al
amianto.Entre las personas que presentan la demanda figura una
vecina de la zona que también resultó afectada por la inhalación de
amianto pese a no tener ningún vínculo profesional ni familiar con
la fábrica de Cerdanyola.En otros casos, los afectados son vecinos
de Ripollet y Cerdanyola que estaban expuestos a la inhalación de
amianto porque residían en un radio de dos kilómetros respecto a la
fábrica de Uralita.El pasado mes de diciembre, un juzgado de primera
instancia de Madrid consideró probado que la ropa contaminada de
amianto fue el origen de varias patologías -como asbestosis o
mesotelioma maligno- que habían provocado la muerte de cuatro
mujeres que lavaban la ropa de trabajo de sus parejas, según ha
recordado el Colectivo Ronda. (10/06/2016)
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La exposición ocupacional al amianto causa más de 100.000 muertes al
año
Tanto en los países que han prohibido el uso de amianto como en
los países que todavía lo utilizan existe un gran número de
trabajadores que tienen un elevado riesgo de desarrollar
enfermedades relacionadas con el amianto, en particular cáncer
de pulmón y mesoteliomas. Según una declaración oficial
presentada por el Collegium Ramazzini –una academia
internacional de 180 expertos en salud ambiental y ocupacional
de 35 países–, la exposición al amianto provoca unas 107.000
muertes en todo el mundo.
El amianto o asbesto es una causa probada de cáncer en humanos,
y todas las formas de amianto se han descrito como carcinógenos
humanos por la Agencia Internacional para la Investigación del
Cáncer (IARC), de la agencia sobre el cáncer de la Organización
Mundial de la Salud (OMS).
Todos los tipos de amianto (incluido el crisotilo, la forma
más utilizada) causan cánceres como el mesotelioma y el de
pulmón
Desde 1993, el Collegium Ramazzini
–una academia internacional de 180 científicos expertos en salud
ambiental y ocupacional de 35 países– ha pedido reiteradamente
una prohibición global de toda la minería, en su fabricación y
el uso del amianto.
La institución ha tomado esta posición basándose en la evidencia
científica mostrando que todos los tipos de amianto (incluido el
crisotilo, la forma más utilizada) causan cánceres como el
mesotelioma y el de pulmón. Además, demuestra que no existe un
nivel seguro de exposición.
"El Collegium reafirma su posición de prohibir toda extracción y
uso del amianto, incluyendo el crisotilo, como medida de salud
pública responsable. Esta declaración actualiza las anteriores
de la academia con un enfoque en las dimensiones de salud
mundial del amianto y las enfermedades relacionadas con el
amianto”, explica Manolis Kogevinas, vicedirector de Centro de
Investigación en Epidemiología Ambiental (CREAL), centro de la
alianza ISGlobal, e investigador que forma parte de esta
agrupación internacional.
Mayor incidencia de cáncer en Reino Unido
Según la declaración, la exposición ocupacional al amianto causa
unas 107.000 muertes al año en todo el mundo, que son el
resultado del cáncer de pulmón relacionado con el amianto.
En España, la exposición al amianto es responsable del
fallecimiento de cinco personas por cada millón de
habitantes
Los trabajadores que han estado
expuestos a este mineral en algún momento de su vida tienen
mayor riesgo de desarrollar, además del cáncer de pulmón,
mesoteliomas (una forma rara de cáncer que se desarrolla a
partir de células transformadas originarias del mesotelio, el
revestimiento protector que cubre muchos de los órganos internos
del cuerpo).
La incidencia de este cáncer varía en diversas áreas del mundo,
dependiendo de la cantidad de amianto utilizado en esa área. Sin
embargo, la mayoría de estas personas expuestas anteriormente
permanecen en la población general sin ninguna vigilancia en
curso de su salud.
Según datos de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) de
2012, las tasas de incidencia fueron más altas en el Reino
Unido, donde se diagnostican cerca de 1.800 casos por año.
Australia era uno de los productores más grandes del mundo del
asbesto, llevando al país a las tasas de incidencia más altas en
todo el mundo (basado en el tamaño de la población). Sin
embargo, la incidencia del mesotelioma en EE UU está
disminuyendo, diagnosticándose unos 2.000 casos al año, mientras
que en Europa y Australia se espera a la meseta en los 10-15
años próximos.
En la actualidad, en España, la tasa de incidencia se sitúa en
torno a los 0,35 casos por cada 100.000 habitantes/año y es
responsable del fallecimiento de cinco personas por cada millón
de habitantes.
La epidemia por exposición al asbesto probablemente no alcanzará
su máximo hasta, al menos, una década en los países más
industrializados y en varias décadas en los países
industrializados.
Los efectos del amianto a pesar de la prohibición
El amianto y las expociones ocupacionales a este mineral
seguirán presentando desafíos en el ámbito de la medicina y la
salud pública, así como en la investigación y la práctica
clínica, y por lo tanto se han convertido en un problema de
salud global.
La epidemia probablemente no alcanzará su máximo hasta, al
menos, una década en los países más industrializados y en
varias décadas en los países industrializados
Los países industrializados que ya
han pasado por la transición de la prohibición del amianto han
aprendido lecciones, y adquirido conocimientos y capacidades que
podrían ser de gran valor en los países industrializados que se
embarquen en esta transición.
"La máxima prioridad para reducir las exposiciones ocupacionales
es la prevención primaria, es decir, que se prohíba el uso de
amianto en los países donde es legal y se prevenga la exposición
de fuentes in situ en todos los países de uso histórico del
amianto", advierte Ken Takahashi, miembro del Collegium
Ramazzini, profesor de Epidemiología Ambiental y director del
Centro Colaborador de la OMS en la Salud Ocupacional de la
Universidad de Salud Ocupacional y Ambiental (UOEH) en
Kitakyushu (Japón).
Según Philip J. Landrigan, presidente del Collegium Ramazzini,
"estas esposiciones son 100% prevenibles, por lo que el objetivo
final debe ser el de cero nuevos casos tanto en países
industrializados como en países en vías de industrialización".
Para la academia, esta pandemia es una prioridad internacional
urgente en la que hay que actuar para proteger la salud de los
trabajadores.
Por esta razón, el Collegium recomienda a los países desarrollar
estrategias para identificar a sus trabajadores anterior y
actualmente expuestos al amianto, para cuantificar su
exposición, y registrarlos para después proponer métodos de
vigilancia de la salud continua y de prevención secundaria.
Además de los trabajadores, deberán someterse a control los
miembros del hogar de los trabajadores si existe amianto en sus
hogares.
http://www.agenciasinc.es/Noticias/La-exposicion-ocupacional-al-amianto-causa-mas-de-100.000-muertes-al-ano
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La Seguridad Social reconoce ya el
90 % de los casos de amianto.
El INSS ha dado un
giro copernicano respecto al problema del amianto, sobre todo en
materia de revisión al alza de las pensiones de los extrabajadores
enfermos. Así se puso de manifiesto ayer durante la asamblea general de
la asociación de afectados Agavida, que celebró asamblea general en el
centro cívico de Caranza. Según explicó el presidente, Ramón Tojeiro,
hasta un 90% de los casos relativos a esta materia que presentan, lo
que se conoce como «cambio de contingencia», son aceptados y la pensión
de invalidez si era por enfermedad común pasa a ser por enfermedad
profesional, lo que se traduce en una mejora sustancial de la
prestación (pensión). Aunque se quejó también de que Navantia continúa
recurriendo estas decisiones, a pesar de su contundencia porque cuentan
con el respaldo de informes médicos. En todo caso reclamó que al
receptor de la prestación se le pague ya la revalorización cuando el
INSS la prueba, aunque Navantia la recurra.
Agavida, que nació
en el 2004, cuenta ya con 435 asociados. Cuentan con un local en la
calle Papa Pío V, bloque 8, de Caranza. Durante la asamblea se
incorporaron algunas personas más a la directiva, porque la entidad
sufre situaciones dramáticas. Un secretario reciente de la junta
directiva ha fallecido recientemente y otro cargo también causó baja
por muerte. En ambos casos como consecuencia de las enfermedades
generadas por la exposición al amianto durante su vida activa. Otros
dos directivos dimitieron porque la evolución de sus enfermedades no
les permiten seguir.
Agavida pedirá al
Parlamento de Galicia que inste al Gobierno a la creación de un fondo
estatal para atender estos casos sin que tengan que acudir uno a uno
ante los tribunales.
http://www.lavozdegalicia.es/noticia/ferrol/2013/03/16/seguridad-social-reconoce-90-casos-amianto/0003_201303F16C8994.htm
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